En doce registros se ha incautado cocaína, hachís, marihuana, dinero, vehículos y material para manipulación de la droga
Entre los arrestados figuran varias prostitutas que la organización utilizaba para la distribución final de la droga
La Guardia Civil, en el marco de la operación "Agüela", ha desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico de cocaína con conexiones entre Murcia, Alicante y Lleida, y que utilizaba clubes de alterne para la distribución final de la droga.
La operación ha culminado con 21 arrestados de nacionalidad española, colombiana y rumana, como presuntos autores de delito contra la salud pública, además de con la incautación, en los doce registros practicados, de cerca de dos kilogramos de cocaína, 100 gramos de hachís y 200 gramos de marihuana, gran cantidad de dinero en efectivo y vehículos de gama alta.
Las actuaciones se iniciaron cuando la Benemérita detectó la existencia de un grupo delictivo organizado dedicado a la introducción de cocaína en la región de Murcia, procedente de Madrid, para su posterior manipulación y distribución.
Con su hijo menor para no levantar sospechas
Las primeras pesquisas sobre la estructura de la red delictiva permitieron a los investigadores detectar uno de estos transportes de cocaína hasta Murcia, en concreto un hombre que, con el rol de mula, llevaba en el interior de su cuerpo más de medio kilo de cocaína de gran pureza. Este integrante de la red viajaba en autobús acompañado de su hijo menor para no levantar sospechas y evitar ser detectado.
La primera fase de la operación culminó con la detención de la mula y otras seis personas más, todas ellas vinculadas a la organización criminal. Durante las detenciones y los registros practicados en los domicilios de los arrestados se incautó cocaína y material utilizado para la adulteración de la droga.
Vinculaciones con locales de alterne
Las investigaciones posteriores para desenmascarar la totalidad de integrantes de la organización y su forma ilícita de actuación dieron resultados positivos al detectar otra rama del entramado criminal que se dedicaba a la distribución de grandes cantidades de cocaína tanto en Murcia como en Alicante y Lleida. Para ello utilizaban a prostitutas de clubes de alterne, sometidas a un férreo control de la organización, que realizaban la distribución de la droga paralelamente al ejercicio de la prostitución, en la mayoría de casos sin conocimiento de los gerentes de los clubes.
La investigación ha permitido determinar que el modus vivendi de los integrantes de esta ramificación era exclusivamente el tráfico de drogas. Para captar a las distribuidoras finales, es decir a las meretrices, establecían un primer contacto con ellas y posteriormente las vinculaban a su actividad delictiva. Las futuras distribuidoras eran seleccionadas aprovechando, en la mayoría de casos, su adicción a las drogas, por lo que, finalmente, acababan contrayendo una elevada deuda con la organización, momento en el que eran coaccionadas. Para ello, la red utilizaba a un grupo de personas que se encargaba de presionar a las distribuidoras y que, si era necesario, solventaba cualquier contratiempo que pudiera existir.
Colaboración con la Gendarmería francesa
Las detenciones de esta parte de la organización se precipitaron cuando se detectó nuevamente la importación de gran cantidad de cocaína por parte de dos mulas. A través de la Gendarmería francesa, en el aeropuerto de Charles de Gaulle-París, se detuvo a las dos mulas integrantes de la organización, un español y una búlgara, cuando hacían escala en vuelo procedente de Brasil con gran cantidad de cocaína en su cuerpo con destino al Levante español.
Movilidad interprovincial
Además de las conexiones de la red delictiva establecidas entre Murcia y Alicante, a finales del pasado año, los guardias civiles detectaron un transporte de droga hasta la localidad de Vielha (Lleida), unas fechas que coincidían con el inicio de la temporada de esquí y, por ello, con una gran afluencia de aficionados a este deporte en la zona.
Este cambio temporal de ubicación llevó aparejada la detención, por parte de la Benemérita, de cinco personas de la organización, tanto proveedores murcianos como distribuidores ilerdenses que fueron sorprendidos cuando realizaban el intercambio de la droga en plena calle, que fue incautada.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios se desarrolló la fase de explotación de la operación en las localidades de Murcia y Torrevieja (Alicante) y Vielha (Lleida), donde se detuvo al resto de integrantes del grupo criminal, incluidos distribuidores intermedios y finales, y se registraron varios inmuebles que finalizaron con la incautación de cocaína, marihuana y hachís, efectos para la manipulación de droga, vehículos y dinero en efectivo.
Igualmente, se desarrollaron actuaciones policiales y registros en diversos locales de alterne en los que se identificó a la totalidad de las mujeres vinculadas a la trama delictiva.
Detenidos:
La operación se ha saldado con la detención de 21 personas de nacionalidad española, ecuatoriana, colombiana, rumana y búlgara, con edades comprendidas entre los 18 y 53 años, todos ellos como presuntos autores de delito de tráfico de drogas.
En los doce registros domiciliarios practicados (siete en Murcia, uno en Torrevieja, uno en Vielha, y el resto en clubes de alterne) y en otras actuaciones, los agentes han incautado cerca de dos kilogramos de cocaína, 200 grs. de marihuana y 100 grs. de hachís, efectos para la manipulación y distribución de la droga, siete vehículos de gama alta y más de 25.000 euros en efectivo.
Los detenidos, droga aprehendida, efectos incautados y diligencias instruidas han sido puestos a disposición de las autoridades judiciales competentes, siendo el Juzgado de Instrucción número 1 de Murcia el que ha ejercido la dirección judicial de la operación.