FEAPS, AFEM y AEDIS reclaman a las comunidades autónomas que prioricen entre sus objetivos el empleo de este colectivo.
Además, solicitan revisar el actual modelo de inserción laboral e introducir fórmulas que garanticen su sostenibilidad.
Con motivo del Día Internacional de los/las Trabajadores/as, el Movimiento Asociativo FEAPS, la Asociación para el Empleo (AFEM) y la Asociación Empresarial para la Discapacidad (AEDIS) apuestan, más que nunca, por la discriminación positiva en el ámbito laboral de las personas con mayor dificultad de empleabilidad, entre las que se encuentran aquellas con alguna discapacidad intelectual o del desarrollo. Estas organizaciones consideran necesario introducir medidas que favorezcan el derecho a un trabajo digno y de calidad de este colectivo especialmente vulnerable.
En los últimos años, el sector de la discapacidad viene soportando una continua reducción de los fondos públicos provenientes del presupuesto destinado a la inserción laboral de las personas con discapacidad. Además, en el "Nuevo marco de programación y evaluación de las políticas activas de empleo" que propone el Ministerio de Empleo y Seguridad Social (que en definitiva supone una reforma del actual sistema de financiación), las personas con discapacidad no se encuentran entre los destinatarios de las medidas para colectivos especialmente afectados por el desempleo, que es uno de los cuatro objetivos prioritarios para 2013. Esta situación crea en el sector más incertidumbre aún sobre la garantía de los fondos públicos destinados a financiar los programas de empleo y, por tanto, la creación y mantenimiento de los puestos de trabajo. Todo ello se une además a la práctica desaparición del empleo con apoyo, así como de las estructuras y profesionales que hasta ahora lo hacían posible.
El nuevo sistema otorga, además, la potestad a las Comunidades Autónomas para priorizar las acciones y medidas que contiene el "Plan Anual de Política de Empleo" con arreglo a sus particularidades. Por ello, las organizaciones representantes de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo y sus familias, solicitan que –en la medida de sus posibilidades–, los responsables de las Administraciones Públicas establezcan medidas de discriminación positiva para lograr una redistribución más equitativa, demostrando así una verdadera apuesta por el empleo de las personas con discapacidad.
FEAPS, AFEM y AEDIS también apuestan por revisar el actual modelo de inserción laboral e introducir nuevas fórmulas para continuar generando oportunidades laborales entre las personas con discapacidad, principalmente aquellas con especiales dificultades. Entre ellas, sin duda, un reparto más eficaz de los recursos públicos, estableciendo medidas de discriminación positiva en las ayudas destinadas al empleo con apoyo, al mantenimiento de puestos de trabajo y a las unidades de apoyo a la actividad profesional en los centros especiales de empleo.
FEAPS contribuye a que cada persona con discapacidad intelectual o del desarrollo tenga su propio proyecto de calidad de vida y pueda lograr su inclusión como ciudadana de pleno derecho y su participación en la sociedad en igualdad de condiciones que el resto. Es un movimiento asociativo formado por 884 entidades repartidas por el territorio español, que representan a más de 139.700 personas con discapacidad intelectual, 235.000 familiares, 40.000 profesionales y 8.000 personas voluntarias.