CCCOO critica que en un momento donde los costes laborales unitarios tienen una variación negativa y donde, por tanto, no existe presión sobre los precios finales de la remuneración de los asalariados, el diferencial de precios con Europa se explica por un sistema energético menos eficiente y una parte del tejido productivo al abrigo de la competencia, que infla sus márgenes de beneficios y que principalmente se sitúa en el sector servicios. Esta falta de control de precios afecta en particular a los trabajadores que perciben salarios más bajos, a los que la inflación afecta de manera más regresiva.
CC.OO. considera que el hecho de que la variación mensual del IPC de enero sea -1,3%, no se puede considerar como una buena noticia, ya que la tasa interanual continua estando en el 2,7%. Esto significa que la perdida de poder adquisitivo para las rentas más bajas de los trabajadores empleados, parados y pensionistas, le sigue afectando de forma muy directa en su vida diaria. Además esta reducción es como consecuencia de las "Rebajas" algo que se viene produciendo a lo largo de los años, por lo que no puede considerarse como un signo positivo, ya que los precios de los productos básicos no se han reducido.
Lamentamos que Gobierno continúe que con su actitud pasiva y permisiva permitiendo que las empresas continúen adaptando su productividad a los salarios de los trabajadores, en una época de crisis tan larga como la que vivimos. Esta actitud continúa perjudicando gravemente a las clases más desfavorecidas, que vienen sufriendo los rigores de estas subidas del IPC sobre sus rentas. El descontrol de la subida de los productos básicos es responsabilidad del Gobierno, con sus políticas de recortes, subidas de impuestos está ahogando a las familias de esta región y de este país.
Por otro lado tenemos que recordar que en los últimos 3 años la subida del IPC a rondado el 10% y el incremento de los salarios han estado por debajo del 1,% con carácter general, lo que significa que los trabajadores en general llevan perdido cerca de un 7% de poder adquisitivo, esto en el mejor de los casos y para aquellos que consiguieron firmar su convenio. Actualmente aún quedan infinidad de convenios que no han sido firmados, y que no han tenido ningún incremento salarial en los últimos 2 o 3 años, para estos trabajadores la pérdida está entorno al 10% de poder adquisitivo lo que agrava aún más la situación.
CCOO critica que en un momento donde los costes laborales unitarios tienen una variación negativa y donde, por tanto, no existe presión sobre los precios finales de la remuneración de los asalariados, el diferencial de precios con Europa se explica por un sistema energético menos eficiente y una parte del tejido productivo al abrigo de la competencia, que infla sus márgenes de beneficios y que principalmente se sitúa en el sector servicios. Esta falta de control de precios afecta en particular a los trabajadores que perciben salarios más bajos, a los que la inflación afecta de manera más regresiva.
Por último decir que el mantenimiento del IPC en estos niveles significa continuar con incrementos de despidos, expedientes y más economía sumergida tanto en la C. Autónoma de Murcia y el resto del país.