IU-Verdes va a presentar al próximo pleno del Ayuntamiento de Murcia una moción para dejar sin efecto el convenio marco que incluye la cesión del pabellón A del colegio público El Carmen a la Archicofradía de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, conocida popularmente como 'Los coloraos', cuando se produzca el traslado del centro a unas nuevas instalaciones, previsto para 2013.
El concejal de la formación, José Ignacio Tornel, ha indicado que el citado convenio, suscrito en 2002 por el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma y la Archicofradía, es un "cheque regalo" que "no representa ninguna colaboración más allá de que unos particulares se apropien del patrimonio público, aprovechando su cargo político y su pertenencia a la hermandad, de la que forman parte otros miembros destacados del PP".
Tornel ha asegurado que la cesión del pabellón, obra del arquitecto murciano Pedro Cerdán, "supone un robo a la ciudadanía desde el abuso de poder y la impunidad absoluta", y ha explicado que "muestra de este atropello" es que el convenio "no ha sido sometido a publicidad ni a oportunidad de alegación", ni tampoco contempla entre sus cláusulas el periodo de cesión del uso.
"En general, las cláusulas de la cesión quedan a la espera de un nuevo convenio entre las partes", ha asegurado el edil, tras denunciar que "es un trato amañado con diez años de antelación por las familias de los caciques murcianos, que siguen utilizando la religión de manera farisea para apropiarse de lo público".
Ha subrayado que quienes firmaron el convenio, el presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel, el hermano de éste, Carlos Valcárcel, y el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, "actuaron con todo el sigilo necesario para ultimar una operación más de atraco al patrimonio público, esta vez con un claro componente particular dada su clara implicación personal en la Archicofradía".
Ante esta situación de "atropello", Tornel ha anunciado que IU-Verdes va a realizar una campaña de denuncia para que la ciudadanía "sepa quién se apropia del patrimonio público en vez de cumplir con su responsabilidad como servidores públicos".
"El barrio de El Carmen ha reclamado de manera incesante espacios lúdicos, culturales y educativos al mismo tiempo que los supuestos servidores de los ciudadanos firmaban paripés para autorizar la apropiación indecente de esos espacios", ha remarcado el concejal.
