La responsable de Universidad del Grupo Parlamentario Socialista, Esther Clavero y la secretaria de Educación del PSRM, Choni Ludeña, consideran que las declaraciones del presidente de la UCAM, José Luis Mendoza, sobre la formación de carácter religioso que seguirán los estudiantes de Medicina de su Universidad, demuestran el error de Valcárcel por la aprobación de tales estudios. Para las responsables socialistas, la aprobación de Medicina en la UCAM por el Gobierno regional va a suponer un grave paso hacia la ideologización y mercantilización de los estudios universitarios en nuestra Región.
Clavero y Ludeña creen que no es de recibo en nuestro Estado democrático que "se hable abiertamente de introducir de nuevo el cristianismo en las aulas de la Facultad de Medicina, máxime cuando la Constitución deja muy claro que España es un Estado aconfesional". También califican de "intolerable" que se quiera imponer la formación médica contra el aborto, cuando éste es, a día de hoy, un derecho reconocido por Ley y que ampara a todas las mujeres.
El PSRM-PSOE se opuso a la implantación de estos estudios en la votación del Consejo Interuniversitario, coincidiendo con lo demandado desde las Universidades Públicas de nuestra Región. Para el PSRM, la falta de especialistas médicos en nuestra Región debe ser resuelta aumentando las plazas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Murcia. "La Universidad pública ofrece criterios de calidad, ya está implantada, tiene buenos recursos y cuenta con un profesorado más que cualificado; por lo que si se necesitan más plazas, que entren los siguientes estudiantes y no que se haga selecciones según el dinero de las familias".
En este sentido, la diputada regional y la secretaria de Educación declaran que no es aceptable que la formación en Medicina se mercantilice y dependa del poder adquisitivo de los que puedan pagar las altas tasas universitarias que marcará esta Universidad privada. "El Gobierno regional debe promover que se formen en Medicina los estudiantes más capaces y que muestren las mejores aptitudes para ser buenos profesionales en el futuro, y no aprovechar la falta de especialistas para poner precio a un título universitario".
Las responsables del PSRM también muestran su oposición a la utilización de los servicios sanitarios públicos para las prácticas de la nueva Facultad. "No aceptamos la competencia en la utilización del sistema público en beneficio de intereses privados. Todos los recursos públicos deben ser prioritariamente para la enseñanza de la Universidad pública, sin ningún beneficio que no sea una excelente formación práctica del alumnado de la Facultad de Medicina pública y sin beneficio privado alguno".
También critican que los aspectos religiosos sean esenciales en la formación médica de la UCAM, lo que entienden como un paso atrás en nuestro Estado democrático al dar prioridad a visiones religiosas sobre lo aceptado por nuestro marco legal de convivencia.
Finalmente, la diputada regional y la secretaria de Educación del PSRM responsabilizan a Valcárcel y al consejero de Universidades, José Ballesta, del error cometido al aprobar esta titulación. Por ello afirmaron que el Partido Socialista sigue apostando por una educación universitaria pública y de calidad, y por una educación que sea coherente y respetuosa con la legislación vigente. De hecho, será muy exigente con el control exhaustivo por parte de la Administración al desarrollo de estos estudios en la Universidad Católica.