La Consejería de Presidencia, a través de la Dirección General de Medio Ambiente, ha restaurado el hábitat degradado del entorno de la Sierra de Revolcadores, en el término municipal de Moratalla, con el fin de mejorar la conservación del importante patrimonio natural y la biodiversidad de la zona.
El proyecto de mejora y restauración, que ha supuesto una inversión de 356.000 euros cofinanciados por la Comunidad Autónoma y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, ha tenido como objeto fomentar la recuperación de espacios forestales, la reducción de la pérdida de suelo en zonas con procesos erosivos, la mejora de la red viaria para un tránsito seguro y la dotación de medios y sistemas de vigilancia contra incendios forestales.
Los trabajos han consistido en la mejora del camino de Inazares a la Rogativa para el tránsito de vehículos, la apertura de la cuneta a un lado del camino, la limpieza y restauración de los pases de aguas existentes y la creación de nuevos pasos y salidas de agua. También se ha reparado un badén para facilitar el cruce con la rambla de la Rogativa y se han construido muros de defensa en los taludes de desmonte que presentan derrumbes, así como escolleras de refuerzo en terraplén.
Asimismo, se ha habilitado una faja auxiliar contra incendios en el camino de Inazares a la Rogativa, con una anchura de 20 metros a cada lado, con el objetivo de establecer una línea de defensa contra los incendios.
Para la faja auxiliar, que se ha realizado en los tramos con cobertura arbórea o abundancia de matorral a lo largo de más de cuatro kilómetros, se ha practicado un desbroce selectivo del matorral. En esa tarea se han respetado las especies protegidas o 'nobles', lo que permite que la estabilidad del suelo no se vea comprometida. Además, se ha dejado una distancia mínima entre matas de seis metros.
En cuanto a los tratamientos selvícolas, se han realizado podas, clareos, resolveos y realces sobre más de 28 hectáreas de terreno, en los que se han eliminado los pies sobrantes, debilitados, dominados o defectuosos para optimizar el desarrollo de la masa y mejorar el porte de los restantes. Se ha consolidado así el papel protector del monte y se ha contribuido al fomento de la biodiversidad.
Por último, se ha repoblado con nuevas especies algunas zonas de la vaguada, de mayor humedad edáfica, y otra zona de mayor altitud correspondiente a un pinar claro de pino laricio. Las especies elegidas para la repoblación fueron cotoneaster, quejigo, fresno, arce, enebro, madreselva, mostajo de hoja recortada, mostajo, cerezo de Santa Lucía, álamo cano, sauce ceniciento, mimbrera y saúco.
El techo de la Región
Con una superficie total de 3.490 hectáreas, el macizo de Revolcadores constituye un territorio montañoso, caracterizado por los paisajes de cumbres y los sustratos dolomíticos. En él se localizan el pico Revolcadores, con 1.999 metros de altitud, y el del Obispo, con 2.014 metros, la mayor cota del territorio murciano.
Con fuertes pendientes y suelos poco profundos, presenta pinares de la variedad de pino blanco, que, asociada a los sabinares albares supramediterráneos de Juniperus thurifera, tiene un carácter casi exclusivo de la Región de Murcia.
El área también presenta una enorme variedad de especies de fauna, como las más de 500 especies de mariposas. Entre los vertebrados, los anfibios están ampliamente representados, con especies tan escasas en la Región como la salamandra común o el sapo partero bético.