La Consejería de Agricultura y Agua, a través del Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA) desarrollará nuevos trabajos para incrementar el cultivo del cerezo en la Región, sobre todo en la zona norte y en otras en las que resulte viable, hasta llegar a las 1.000 hectáreas.
El director general de Industria Agroalimentaria y Capacitación Agraria, Ángel García Lidón, destacó que "según los resultados obtenidos con el proyecto de I+D en el cerezo, ya se sabe que las 80 variedades en estudio pueden dar buenas producciones en toda la zona norte de la Región, sin mostrar desarreglos por falta de frío invernal".
Los datos experimentales disponibles sugieren que los mejores resultados se consiguen con los patrones 'Mariana 2624' en suelos margosos, que son la mayoría en los regadíos de la Región, y con los híbridos de melocotonero x almendro en los suelos pedregosos; ambos patrones con intermediario del ciruelo mirobolán Adara, que es compatible con todas las variedades de cerezo. El propio Adara es recomendable en suelos arenosos, donde puedan presentarse problemas de nematodos.
Los patrones híbridos de melocotonero x almendro podrían incluso permitir el cultivo del cerezo en secanos frescos, en zonas de montaña principalmente, según apuntan los primeros resultados experimentales del citado proyecto.
Todos estos conocimientos son producto del desarrollo del proyecto de I+D en cerezo iniciado hace ya más de seis años por el grupo especializado en el cultivo de cerezo integrado por investigadores del IMIDA, técnicos de la Dirección General de Industria Agroalimentaria y Capacitación Agraria, agricultores avanzados de la Región y, recientemente, de los ayuntamientos de Mazarrón y Aledo, interesados en desarrollar este cultivo en sus municipios.
Este grupo se reunió recientemente en el IMIDA para planificar los trabajos de experimentación regional y los estudios de comportamiento de las variedades y patrones de cerezo en 2012.
Desarrollo del proyecto
El programa se centra en el estudio de tres colecciones de variedades ubicadas en fincas experimentales de la Consejería en Jumilla, El Chaparral y La Alberca. Los árboles en seguimiento completarán el próximo año su sexta hoja en Jumilla y el quinto verdor en las otras fincas, por lo que los datos que se obtengan ya serán bastante fiables respecto a su comportamiento agronómico y productivo (floración, características de los frutos, color, contenido en azúcares, resistencia a plagas y enfermedades, entre otros).
García Lidón resaltó que "las colecciones se utilizan para custodiar el material vegetal bajo la responsabilidad del IMIDA, que ha suscrito acuerdos con otros centros y empresas para experimentar con materiales protegidos".
Los datos de comportamiento varietal extraídos de estas colecciones sirven para hacer una primera evaluación de la utilidad y el interés de las variedades, lo que ayuda a plantear en la Región una red experimental de parcelas o plantaciones de referencia en La Alberca, Torre Blanca (Torre Pacheco), Moratalla, Cieza, Ulea y Campotéjar. El programa también incluye ensayos y plantaciones de referencia de patrones, según tipos de suelo, en Jumilla, La Alberca y El Chaparral.
Además, el programa de 2012 cuenta con parcelas de seguimiento ubicadas en fincas comerciales, así como otras parcelas de observación que alcanzan en algunas de ellas en plena producción hasta 30 toneladas de cerezas por hectárea. Todo ello contribuye a facilitar información contrastada sobre las variedades y las incidencias de este cultivo en las explotaciones agrícolas.