Carmen Consoli, la cantantessa, llega al festival La Mar de Músicas, acompañada por el joven cantautor murciano Maez

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Los "auroros" de Cerdeña, Concordu e Tenore Di Orosei gratis en la Catedral Antigua

Carmen Consoli, la cantantessa, llega al festival La Mar de Músicas, acompañada por el joven cantautor murciano Maez

Por fin llega para muchos la jornada en la que aparecerá una de las cantautoras más admiradas en Italia, Carmen Consoli. Amada por la crítica y muy querida por sus fans. La cantantessa como es conocida en su país, tiene un estilo inconfundible en el que hace que converjan la energía del rock, la armonía del pop y la profundidad de la mejor canción de autor. Con la voz rasgada y enfadada del rock es capaz de transformar sus canciones en una melodía susurrada. Antes, saldrá al escenario del Cuartel de Artillería mañana domingo 17 de julio el joven cantautor murciano Maez. El concierto doble cuesta 15 Euros.

De joven promesa de Catania, es ya una figura de primer plano de la música italiana. Esta siciliana nacida en 1974 comenzó desde muy joven a desarrollar su talento musical con varias formaciones hasta que en 1996 presentó su primer álbum en solitario "Due Parole", disco que contendría la canción "Amore Di Plastica" y que sería aclamada en el Festival de San Remo por público y crítica. Unas ascensión impecable desde entonces que le ha llevado a recorrer escenarios de todo el mundo y colaborar al lado de artistas como Goran Bregovic, Angelique Kidjo o Franco Batiatto. La artista acaba de firmar un nuevo álbum, "Elettra" en el que combina lirismo, tradición siciliana y una belleza extenuante gracias a su expresiva voz. En Cartagena viene al que será su único concierto en España.

Carmen Consoli (Catania, 1974) empezó a tocar la guitarra eléctrica a los trece años y asegura que, desde entonces, la música ha sido su vida. En una larga gira por Europa y Estados Unidos se reencontró con Sicilia. Contó que su mente estaba todo el tiempo en la isla y, a su regreso, sintió la necesidad de adentrarse en sus raíces. Ese viaje interior a las tradiciones, la lengua y los instrumentos musicales de su tierra natal se plasmó en las diez canciones de 'Eva contro Eva'. Para ello contó con Goran Bregovic y Angélique Kidjo: "Sicilia está cerca de África, respiramos los mismos aromas", explicó en EL PAIS. Antes, la cantautora, que admira a Janis Joplin y Billie Holiday, había publicado cinco discos –más de un millón de ejemplares vendidos- de pop alternativo, a la vez que comercial, con influencias anglosajonas: desde PJ Harvey, con quien la han comparado a menudo, hasta Nirvana.

Acercándose a los cuarenta, y convertida en artista de culto en Italia, Carmen Consoli habría heredado el gusto por la música de su padre, un guitarrista aficionado al blues y la música negra. Con su primera banda, Moon Dog's Party, se dedicaba a versionear éxitos de Otis Redding, Aretha Franklin o Tina Turner. Y, desde el primer disco con su nombre, en 1996, 'Due parole', hasta el más reciente, 'Elettra', del 2009, Consoli ha sembrado el cancionero italiano de títulos como 'Amore di plastica', 'Confusa e felice', 'Parole di burro', 'L´ultimo bacio', 'Non molto lontano da qui' o 'Mandaci una cartolina'.

Como le comentó a Pablo Gil, para El Mundo, hace ya unos años "mis canciones se mueven entre un volcán y el mar: a veces grito y hago ruido, otras hay calma y armonías románticas y agradables". Escribió entonces Gil que su voz ha acompañado a una generación de jóvenes italianos que encontraron en sus letras el eco de sus propias angustias, la típica encrucijada del paso de la adolescencia al mundo de los adultos. Y lo que le dijo Carmen Consoli sigue siendo válido: "Para mí es muy importante reconocer que creces, que no puedes cantar canciones juveniles eternamente. Cuando tenía veinte años mis historias iban de rebeldía y transgresión; ahora intento ser más una mujer de treinta. Quiero vivir mi edad, no pretender otra cosa".

Maez

Es un chico de la tierra –de San Javier- que se hace llamar Maez. Ganador del certamen nacional de cantautores Cantigas de Mayo, celebrado en Ceutí en 2010, también él, como Russian Red, canta en inglés -folk acústico- y alguno se ha atrevido a comparar su forma de cantar con las de sus ídolos Amos Lee o Ray Lamontagne. Tiene 24 años, estuvo tocando la batería en un grupo hardcore de París, y asegura dejarse la barba por pura pereza. Pablo Matías López cambió un buen día la batería por una guitarra y se puso a escribir canciones. Hace un año, en una entrevista, el que siempre fue el raro de su pandilla decía: "Mis amigos pensaban que sería gay y más tarde que estaba loco. Ahora sienten hacia mí una cierta admiración".

Concurdu e Tenore Di Orosei

Desde Orosei, en la costa de Cerdeña, llegan las voces de este Cuncordu e Tenore. En su página web oficial, 'zassu ufitziale', se cuenta que su aprendizaje vocal nace y madura en la escuela de las hermandades religiosas de Sas Animas, Santa Rughe y Su Rosariu, por lo que se refiere al canto sacro -llamado 'a cuncordu- y, en los bares, para el canto profano -llamado 'a tenore'- de voz gutural y cuya técnica recuerda a la de los mongoles. Dos formas de canto polifónico conviven en la isla: la del Tenore, popularizada en el extranjero por formaciones como Tenore di Bitti, y la del Coro o Cuncordu de las celebraciones religiosas –incluídos funerales- que hoy se usa sobre todo durante la Pascua. Así que, mientras los Tenore cantan música profana para bailar alegremente en las plazas de los pueblos, los Cuncordu se concentran en la música sacra.

Aunque los dos primeros discos de Cuncordu e Tenore di Orosei datan de 1994 –once cantos del repertorio sacro en la iglesia de San Pedro de Galtelli- y de 1996 –con las canciones más conocidas de la tradición profana- ya se había podido escuchar una primera encarnación, a principios de los años ochenta, en 'Polyphonies de Sardaigne' y 'Polyphonies de la Semaine Sainte' –dos discos de Le Chant du Monde-. En 1999 los sardos publicaron 'Colla voche', fruto de un proyecto sobre música tradicional mediterránea y música contemporánea con el chelista Ernst Reijseger y el percusionista Alan Purves. En 2004, con una relectura de la ópera del escritor Marcello Fois, iniciaron una gira en la que coloreaban con sus voces la narración del autor. Y ese mismo año participaron en 'Il rito e la memoria', concierto en Milán del trompetista Paolo Fresu con el pianista Diederick Wissels, el cuarteto de cuerda Alborada, el Cuncordu de Castelsardo, el Cuncordu 'e Su Rosariu di Santu Lussurgiu, Elena Ledda y Dhafer Youssef. También han colaborado en dos películas del director alemán Werner Herzog.

Discos como los grabados con el productor Stephan Winter –'Amore profundhu', 'Miserere'...- les han llevado a actuar por media Europa y a compartir improvisados encuentros con el coro de las Voces Búlgaras o el grupo Huun-Huur-Tu de la República de Tuva. El Cuncordu e Tenore de Orosei lleva consigo el legado de una isla orgullosa de tener su propia lengua, sus danzas y sus cantos. Sus voces protegen un patrimonio oral valioso.

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