La Federación de Enseñanza de CCOO acusa a la Consejería de Educación instrumentalizar al Servicio de Inspección Educativa contra el profesorado que participa en las movilizaciones de rechazo a la Ley de Medidas Extraordinarias o de Agresión al Sistema Público y sus Empleados.
Durante la mañana del viernes 4 de febrero, el Servicio de Inspección Educativa se ha dirigido a los directores de los centros educativos de la región requiriéndoles información sobre el número e identidad de los profesores y profesoras participantes en los encierros de la noche del jueves 3. Así mismo, el Servicio de Inspección se ha interesado por el hecho de si en los centros educativos consultados se exhiben pancartas con el lema educativo “+ Recortes en educación, – Futuro para la región”.
La Federación de Enseñanza de CCOO admite ignorar si recientemente se han ampliado las funciones y competencias de la Inspección Educativa, extendiéndolas al control de la actividad política, sindical, cultural y social de los y las docentes de la escuela pública regional.
La Federación de Enseñanza de CCOO manifiesta su rechazo a esta nueva expresión de la escalada represiva y autoritaria de la Consejería de Educación, que comenzó con la prohibición de realizar claustros de profesores para abordar temas propios de la organización escolar y del ejercicio profesional; que continuó con la esperpéntica carta del Director General de Recursos Humanos en la que se amenazaba a los equipos directivos (y que ya ha tenido una adecuada respuesta por parte de la inmensa mayoría de éstos) y que pretendía evitar la realización de concentraciones y encierros; que ha seguido con la retirada de pancartas (normalmente repuestas a las pocas horas) y que culmina, por el momento,
con esta utilización partidista y sectaria de la Inspección Educativa que ahora denunciamos.
La Federación de Enseñanza de CCOO llama:
A los inspectores e inspectoras de educación, cuya mayoritaria condición de demócratas conocemos, a no dejarse manipular ni instrumentalizar por iniciativas políticas autoritarias.
A los equipos directivos a seguir mostrando entereza y dignidad, como han demostrado con su carta pública al Consejero, frente a las presiones políticas de la Consejería.
A los y las docentes de la región a participar masivamente en las actividades y movilizaciones de protesta para exigir la derogación de la Ley de Agresión y a convertir, el próximo jueves 10, la octava manifestación contra ella en una demostración descomunal de dignidad y resistencia.