La mayoría de las medidas judiciales decretadas en 2010 están vinculadas con los programas de actuación en medio abierto para potenciar la competencia social del menor y garantizar una mejor integración
El consejero de Justicia y Seguridad Ciudadana, Manuel Campos, abogó hoy por "mejorar la coordinación entre administraciones en la ejecución de las medidas judiciales impuestas a menores con la finalidad de contribuir a su reinserción social y laboral", con motivo de la reunión mantenida en la Consejería con los titulares de los Juzgados de Menores de Murcia y el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región de Murcia, Juan Martínez Moya.
La directora general de Prevención de Violencia de Género y Reforma Juvenil, Teresa Moreno, también asistió a este encuentro para establecer una línea de coordinación y colaboración directa con los magistrados encargados de aplicar las leyes a menores que hayan incurrido en conductas tipificadas como delito o falta.
Campos señaló la importancia de "fortalecer los contactos institucionales para que exista un diálogo permanente y constante" en el desarrollo y ejecución de las medidas judiciales para "garantizar su cumplimiento óptimo en beneficio de la protección, tutela e integración de estos menores".
Para el titular de Justicia y Seguridad Ciudadana, "la respuesta judicial además de incluir el aspecto sancionador debe contemplar el educativo y formativo para intentar modificar las actitudes inapropiadas de los jóvenes y fomentar habilidades, valores y actitudes para incidir en su desarrollo personal y social".
"Los programas desplegados por Gobierno regional en materia de reforma juvenil están orientados hacia la recuperación y reeducación de los jóvenes para alcanzar la estabilidad personal y familiar, así como hacia la capacitación para lograr su inserción en el mercado laboral", subrayó el consejero, que aseguró que la Comunidad continuará con la dotación de medios a los centros que trabajan con estos jóvenes.
Apuesta por la reinserción social
La mayoría de las medidas judiciales impuestas a menores en 2010 correspondieron a las ejecutadas en medio abierto (1.975), es decir, aquellas que se llevan a cabo en el propio contexto de desarrollo de los jóvenes, frente a las decretadas en medio cerrado (334), según los datos contabilizados el pasado año.
La libertad vigilada fue la medida judicial en medio abierto más adoptada por los Juzgados de Menores el pasado año (877), seguida de la realización de tareas socio-educativas (570), la prestación de servicios en beneficio de la comunidad (524), el acogimiento familiar (44), el tratamiento ambulatorio (2), la asistencia en centro de día (1) y la permanencia de fin de semana en el domicilio (1).
De las 334 medidas judiciales impuestas en medio cerrado, 89 se decretaron en centros de internamiento en régimen semiabierto, 27 en régimen cerrado y 16 en régimen abierto. Asimismo, cuatro menores recibieron atención educativa especializada o tratamiento específico en los centros de internamiento y tres jóvenes permanecen los fines de semana en un centro.
El 91,6 por ciento de los menores de edad con medidas judiciales en la Región de Murcia, cuya edades están comprendida entre los 16 y 18 años, son chicos, frente a un 8,4 por ciento de chicas. El 71 por ciento de los jóvenes infractores eran españoles, mientras que el resto eran extranjeros.