El apoyo financiero de la Comunidad Autónoma a dos proyectos realizados en Togo por la ONG 'Azul en Acción' le ha supuesto al consejero de Política Social, Mujer e Inmigración, Joaquín Bascuñana, la concesión del premio que cada año otorga esta entidad sin ánimo de lucro.

Los dos proyectos que han justificado el galardón tienen como fin la mejora de la salud ocular de la población de las regiones de Dapaong, en 2008, y de Savanes, en 2009, por un importe total de 53.572 euros, costeados íntegramente por la Administración regional.

El premio, entregado por el presidente de la ONG, Francisco Murcia, consiste en una estatua del escultor murciano Antonio Campillo, que representa una maternidad como símbolo del amor hacia los demás. Se trata de la segunda edición de este galardón. En la primera recayó en el Ayuntamiento de Murcia. Al acto han asistido también el director general de Inmigración, Cooperación al Desarrollo y Voluntariado, Leopoldo Navarro; el director médico de 'Azul en Acción', Fermín Espín, y su secretario Jesús Franco, junto a otros miembros de la ONG.

'Azul en Acción' nació en el seno de la Policía Local de Murcia. Su fin primordial es la ayuda humanitaria y la cooperación para el desarrollo. Desde su constitución en el 2000 ha llevado a cabo diversos proyectos en Marruecos, Malí, Mauritania, Camerún, Perú y Togo, mediante una continuada labor de sensibilización de la sociedad murciana sobre la realidad de estos países.

Los dos proyectos mencionados continúan con la labor que 'Azul en Acción" y la OCDI, su contraparte en Togo, vienen desarrollando satisfactoriamente desde 2001, en el ámbito de la sanidad ocular, en las citadas regiones togolesas.

La próxima expedición programada es a la población de Cara, también en Togo, del 15 al 29 de enero de 2011. Para este proyecto, el equipo médico sanitario contará con el hospital-camión auto transportable, que posee la ONG, con una capacidad operativa para realizar diariamente 500 consultas, con tratamiento farmacológico y graduación. También se podrán efectuar 30 intervenciones quirúrgicas. Disponen, además, de dos vehículos de apoyo que llevan a cabo consultas itinerantes y transportan a los enfermos necesitados de cirugía hasta el hospital.

En esta zona se han ejecutado ya nueve proyectos similares de una envergadura progresiva al presupuesto disponible y a la capacidad de gestión de la ONG, que desde 2007 participa en el diseño de la estrategia de desarrollo de la zona, junto con autoridades locales y otras asociaciones nacionales e internacionales.

Cegueras reversibles

En Togo, y en especial en la Región de Dapaong – por sus condiciones climáticas – existe un alto índice de enfermedades oculares (cataratas, glaucomas, tracomas), que causan ceguera invalidante. Y estas cegueras, que en su mayoría (95 por ciento) son reversibles, suponen un grave impedimento y una merma muy considerable en la calidad de vida de quien las padece, afectando también a su entorno familiar y laboral. Además, el estado actual de la sanidad en el país no permite tratar estas patologías, con lo que la oportunidad de la intervención es evidente y demandada por la propia población de la zona.

Dos veces al año, un equipo médico, formado por oftalmólogos y personal auxiliar, se desplaza desde Murcia a Togo, por periodos de 15 días, para realizar estas intervenciones. En cada una de las campañas médicas se practican unas 200 intervenciones de cataratas y 40 de glaucoma. Simultáneamente, se efectúan 1.500 tratamientos, 2.500 consultas y 500 graduaciones. Además, se forman equipos médicos de intervención itinerante, que son quienes realizan la selección de los pacientes que necesitan intervención en las campañas siguientes.

Las campañas hacen hincapié en tratar a los niños, propensos a los tracomas. Y es que la invalidez, la visión incorrecta y las afecciones oculares para los menores dificultan su adaptación al entorno escolar y son causa de absentismo y analfabetismo.

También se presta especial atención a las mujeres, que son el pilar de la economía familiar y quienes se hacen cargo de las personas inválidas de la familia. Además, se da prioridad a todos aquellos con menos recursos y a los que tengan mayor grado de discapacidad.