En 2003, el Foro Ciudadano editó El otro estado de la Región. Informe 2003. Fue una obra pionera, el primer estudio de conjunto sobre la situación económica, social, cultural y política de la Región de Murcia. En ninguna otra comunidad autónoma española se había realizado un estudio de estas características.
A lo largo de catorce capítulos, analizaba de forma rigurosa y crítica los principales problemas de la Región y sugería propuestas concretas para afrontarlos. Era una especie de “libro blanco” que, más allá de la propaganda política y mediática, describía el verdadero estado de la Región de Murcia en los más diversos ámbitos sociales.
En su elaboración participaron de forma desinteresada más de cincuenta profesionales, expertos en cada uno de los temas analizados y procedentes de los más diversos sectores sociales: la docencia, la investigación, la administración pública, la empresa privada, los sindicatos y las organizaciones no gubernamentales.
El Foro Ciudadano quiso garantizar su más plena independencia en la promoción de esta iniciativa. Por eso, el Informe 2003 no recibió ninguna financiación externa, ni pública ni privada. La edición se sufragó íntegramente con las aportaciones voluntarias de los socios y con los ingresos obtenidos por la venta del libro.
El libro tuvo una excelente acogida y se convirtió en una obra de consulta para muchas organizaciones sociales, sindicales y políticas. Su éxito fue tal que el Foro Ciudadano decidió elaborar el Informe 2006, cuyo impacto fue todavía mayor. Hoy, ambos informes pueden consultarse en la web: www.forociudadano.org
Dada la buena acogida de las dos ediciones precedentes, en el presente Informe 2010 hemos mantenido la misma metodología de trabajo, el mismo sistema de autofinanciación, el mismo listado de temas y la misma nómina de colaboradores habituales, a la que se han incorporado algunos otros. La novedad es que en casi todos los capítulos se ha incluido la historia de un caso particular, sea una persona o un acontecimiento, para ilustrar con ella los datos y argumentos más generales.
Además, en este Informe 2010 han podido contar con unos sesenta colaboradores, aunque algunos de ellos han preferido no firmar o lo han hecho de forma colectiva. Esta necesidad de recurrir al anonimato es, "por sí misma, un indicador del déficit democrático que padece esta Región y del carácter monopolístico y clientelar de su sistema político y mediático, en el que muchas personas no pueden expresar públicamente sus opiniones, por temor a ser de uno u otro modo represaliadas".
"Otro indicador del déficit democrático de las administraciones públicas de la Región de Murcia es la falta de transparencia informativa de muchos ayuntamientos y de la mayor parte de las consejerías del Gobierno autonómico. Esta opacidad informativa ha afectado a la elaboración del presente Informe 2010, por la dificultad de acceder a documentos y datos oficiales que deberían ser de conocimiento público".
En el Informe 2010, se han tenido en cuenta tres escalas temporales diferentes. En primer lugar, centrándose en los últimos cuatro años (2007-2010), que es el período transcurrido desde el precedente Informe 2006 y cuyo acontecimiento crucial es la crisis económica mundial iniciada en 2007, una crisis cuyo impacto está siendo más fuerte en España que en otros países de la Unión Europea, y más fuerte aún en la Región de Murcia que en otras comunidades españolas. Se ha creído conveniente analizar las deficiencias estructurales que explican esta especial vulnerabilidad de la Región.
Y para ello han tenido en cuenta otros dos ciclos temporales más amplios: por un lado, el período 1995-2010, es decir, los quince años de gobierno del Partido Popular en la Comunidad Autónoma y en la mayor parte de municipios; por otro lado, el período 1982-2010, es decir, los veintiocho años de existencia de la Región de Murcia como una de las 17 comunidades españolas, con un Estatuto, una Asamblea y un Gobierno propios.
En efecto, el impacto de la crisis económica mundial ha puesto al descubierto las deficiencias estructurales de la Región de Murcia, unas deficiencias que desde el Foro Ciudadano han venido denunciando en los últimos diez años, especialmente en el Informe 2003 y en el Informe 2006. Pero los gobernantes regionales y locales no quisieron prestar la menor atención a nuestros análisis e incluso los descalificaron como “antimurcianos”, según apuntan desde el Foro. "Nos ha tocado representar el papel de Casandra, la mujer que predijo la caída de Troya y a la que todos menospreciaron como si fuera una loca".
"Pues bien, la caída de Troya ya ha sucedido. La Región de Murcia ha sucumbido ante el brutal impacto de la crisis económica mundial. Los murcianos han comenzado a despertarse dolorosamente de la quimera del ladrillo, a la que se habían entregado con un gran entusiasmo y una gran ceguera durante la última década. Baste un solo dato para reconocer cuál es nuestra verdadera situación: en 1995, la renta per cápita murciana se situaba en el 82,6% de la media española, mientras que en 2009 se situó en el 81,3%. En los últimos quince años, no sólo no hemos conseguido acercamos a la media española, sino que nos hemos alejado 1,3 puntos, manteniendo una diferencia negativa por encima de los 18 puntos porcentuales. Este dato, por sí solo, revela el rotundo fracaso de la política practicada por el Partido Popular en el período 1995-2010".
En este Informe 2010, se ha procurado dar cuenta de lo que realmente ha sucedido, para que no volvamos a cometer los mismos errores del pasado. "La estrecha confluencia entre un régimen político cada vez más monopolístico y un modelo de desarrollo cada vez más insostenible desde el punto de vista económico, social y ambiental, ha engendrado los dos problemas más graves a los que se enfrenta hoy nuestra Región: por un lado, la corrupción política generalizada, como punta del iceberg de un régimen autonómico y municipal con una muy baja calidad democrática; por otro lado, los bajísimos indicadores de desarrollo humano, que siguen situando a la Región de Murcia en la cola de las comunidades autónomas españolas. Estos dos problemas son la principal herencia legada por los quince años de gobierno del Partido Popular, pero revelan también unas deficiencias estructurales que la Región de Murcia ha venido arrastrando desde su constitución oficial como comunidad autónoma en 1982, y que tendrá que corregir en los próximos años si quiere reducir la persistente distancia que la separa de las más avanzadas comunidades autónomas españolas y europeas".
Con este informe esperan que, como ya sucedió con los dos anteriores, pueda servir de instrumento de trabajo a los partidos políticos, a los sindicatos, a las organizaciones agrarias y empresariales, a las asociaciones y plataformas sociales, en fin, a toda la ciudadanía, para que "entre todos podamos mantener un verdadero debate democrático y alcanzar amplios acuerdos sobre el nuevo modelo de desarrollo que queremos para la Región de Murcia".