El consejero de Política Social, Mujer e Inmigración, Joaquín Bascuñana, indicó hoy que su Consejería ha subvencionado con 160.684 euros a la Asociación de Ayuda e Investigación del Trastorno Límite de la Personalidad en la Región (ARMAI-TLP), entre los años 2007 y 2010.
Bascuñana realizó estas declaraciones en el acto de inauguración de las I Jornadas sobre Trastorno Límite de la Personalidad que se celebran hoy en Murcia, y donde estuvo acompañado de la directora gerente del IMAS, Isabel Sola, del presidente de ARMAI, José Castillo, y la directora de la asociación, Iluminada Ramos.
Según estudios de los casos atendidos desde la Fundación, un tercio de las mismos están derivados por unidades y servicios de la Dirección General de Familia, Igualdad e Infancia. El porcentaje aumenta si se considera la demanda directa planteada en la sede de la entidad y las derivaciones procedentes de los Centros Especializados de Apoyo Familiar, situándose en el 53,31 por ciento del total. También destaca la cantidad de casos enviados desde los Centros de Servicios Sociales de Atención Primaria (36,66 por ciento).
El Trastorno Límite de la Personalidad afecta en la Región de Murcia a unas 30.000 personas, mientras que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 2 por ciento de la población mundial adulta padece el TLP. De todos estos casos, el 70 por ciento han sufrido experiencias traumáticas o abusos en su infancia. No obstante, las mismas fuentes indican que esta enfermedad aún no está suficientemente investigada.
La ARMAI-TLP nació en enero de 2006 y empezó a funcionar dos años después. Está formada por un grupo de padres cuyos hijos sufren esta enfermedad y su función es acoger a familiares y ofrecerles asistencia psicológica, asesoramiento jurídico, psicoeducación y técnicas para afrontar el estrés, así como financiar las actividades de apoyo y orientación a familias y a menores con problemas compatibles con el posible desarrollo del Trastorno Límite de Personalidad.
Disponen de dos programas: uno con adolescentes y otro con familiares, y su ámbito de actuación comprende toda la Región de Murcia. El primero de los programas está dirigido a mejorar la calidad de vida de los adolescentes afectados. Para ello hay que conseguir que confirmen su confianza y seguridad dentro de los límites terapéuticos, motivarlos para el cambio, enseñándoles nuevas formas de comunicarse con los demás, tener pensamientos positivos, mejorar la autoestima y que aprendan a relajarse.
Respecto a los familiares, el programa esta encaminado a enseñar a los padres a definir los problemas y saber cómo resolverlos, mostrarles nuevas pautas de comportamiento para mejorar las relaciones familiares y promover formas de convivencia más acertadas con un adolescente afectado por el TLP.
Estos trastornos comienzan normalmente en la adolescencia, si bien el diagnóstico como tal no se establece hasta la edad adulta. Los indicadores principales que presentan estos adolescentes son mala adaptación social y escolar, comportamientos antinormativos, déficit en la regulación de los afectos, elevada impulsividad, tentativas de suicidio repetidas y depresiones graves.
Los servicios que se brindan a las personas afectadas van desde terapias individuales y grupales, que tratan los distintos síntomas con la corriente cognitiva conductual; orientación laboral y ocupacional, atención a adolescentes de entre 13 y 17 años y formación de coterapeutas para familiares. También se ofrece formación profesional, asesoramiento jurídico y psiquiátrico y sesiones especiales de terapia familiar, además de escuela de familia, tratamiento de hiperactividad en menores y campañas de sensibilización y divulgación.
Entre los proyectos de la Fundación figuran la creación de pisos terapéuticos de convivencia y un hospital o centro de día. Actualmente, su sede está en la primera planta del Edificio Alba, de Murcia, en la avenida de la Libertad.