Las obras se centrarán en la construcción de vados en los cruces de peatones, eliminación de obstáculos y construcción de aparcamientos reservados a discapacitados
La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio subvenciona la eliminación de barreras arquitectónicas en los accesos a las playas de La Manga del Mar Menor dentro del proyecto de 'Supresión de barreras arquitectónicas y urbanísticas', que la Comunidad desarrolla desde hace años a través de subvenciones a las corporaciones locales.
El director general de Territorio y Vivienda, Antonio Navarro, señaló que el objetivo de esta actuación es "mejorar la accesibilidad universal a las playas a través itinerarios adaptados que faciliten los desplazamientos a las personas con movilidad reducida en zonas turísticas de gran afluencia".
Las obras proyectadas, financiadas en un 75 por ciento por el Ejecutivo autonómico, se centran en el primer tramo de la Gran Vía de La Manga del Mar Menor, hasta el Canal de la Gola, donde se salvará el desnivel existente entre la acera y la calzada en los pasos de peatones. Para ello, se facilitará el tránsito mediante soluciones arquitectónicas que se integren con las particularidades de esta franja costera.
Las obras se completarán con la reubicación de elementos de mobiliario urbano tales como papeleras, farolas o semáforos que quedarán dispuestos en un entorno ergonómico y accesible, en el que, además, se instalarán avisadores acústicos en los semáforos y se construirán aparcamientos en batería, con rampas de acceso a las aceras.
"De este modo seguimos impulsando obras para fomentar el acceso a los recursos turísticos y naturales a toda la población de la Comunidad y, por extensión, a los miles de visitantes que anualmente se desplazan a la Región para conocer su litoral", concluyó el director general.