La primera convocatoria reconocerá competencias en Educación Infantil, Atención Sociosanitaria a dependientes en instituciones sociales y atención sociosanitaria en domicilio
La Consejería de Educación, Formación y Empleo ha puesto en marcha el Procedimiento de Reconocimiento, Evaluación, Acreditación de la Competencia Profesional, que permitirá a los trabajadores certificar oficialmente los conocimientos profesionales que hayan adquirido a través de la experiencia o de procedimientos no formales de formación.
Se trata, en opinión del titular de Educación, Constantino Sotoca, "de uno de los retos más importantes para el sistema de formación profesional y de empleo en la Región porque va a sacar a la luz los niveles de competencia profesional que, sin duda, los trabajadores de nuestra comunidad poseen y que demuestran cada día en sus puestos de trabajo pero que no cuentan con el reconocimiento de una titulación oficial".
En este sentido, Sotoca destacó que "a través del Procedimiento, los trabajadores podrán aspirar a un trabajo de superior categoría que requiera de un título oficial, acceder a otros módulos formativos, y ampliar sus posibilidades de regresar al mercado de trabajo a aquellos trabajadores que han sido expulsados del mercado de trabajo como consecuencia de la crisis, ya que contarán con un certificado oficial que acreditará sus competencias profesionales".
En la Región este procedimiento estará coordinado por el Instituto de las Cualificaciones, y se pondrá en marcha de forma gradual a través de sucesivas convocatorias concretas para cada una de las cualificaciones profesionales.
En cada convocatoria se podrán evaluar distintas competencias relacionadas con una profesión, y el trabajador decidirá en cuántas de ellas se inscribe, en función de su experiencia laboral o de su formación, y una vez superada la evaluación del procedimiento, se expedirá una acreditación oficial por cada una de las competencias que supere el trabajador.
Los trabajadores podrán ir acumulando experiencias hasta obtener todas aquellas que sean necesarias para conseguir un certificado de profesionalidad, o convalidarlas por la parte correspondiente de un ciclo formativo de formación profesional.
Esta acreditación tendrá validez en todo el territorio nacional, y los efectos profesionales y académicos, correspondientes.
El consejero se mostró convencido de la necesidad de poner en valor esa experiencia e impulsar y animar a los trabajadores en su formación a lo largo de toda su vida, "porque, además, la Unión Europea ya advierte que de aquí a 10 años sólo habrá un 15 por ciento de empleos no cualificados".
Los primeros reconocimientos en Atención Infantil y Dependencia
La primera convocatoria de este Procedimiento reconocerá las competencias en tres cualificaciones profesionales diferentes: Educación Infantil, Atención Sociosanitaria a dependientes en instituciones sociales y atención sociosanitaria a personas en su domicilio, y habrá un cupo de 450 plazas, 150 por cada una de las cualificaciones.
El plazo para inscribirse en esta convocatoria es del 1 al 30 de septiembre para Atención Sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales, del 1 al 31 de octubre para Educación Infantil, y del 1 al 30 de noviembre para la Atención Sociosanitaria a personas en el domicilio.
Requisitos de acceso y fases del procedimiento
Sotoca subrayó que "los participantes tendrán que acreditar al menos tres años de experiencia laboral, con un mínimo de 2.000 horas de actividad laboral o haber recibido, como mínimo, 300 horas de formación en los últimos diez años". Además, deberán haber cumplido 20 años en el momento de formalizar la inscripción, en el caso de la convocatoria de Educación Infantil, y 19 años para las otras dos cualificaciones relacionadas con la atención a personas dependientes.
Las personas que cumplan estos requisitos participarán en un proceso que incluye una fase de asesoramiento, en la que un asesor del ámbito docente o profesional ayudará al candidato a recopilar toda la documentación correspondiente a las competencias que quiera acreditar y a preparar su currículum y dossier personal.
En una segunda fase se acometerá la evaluación de la competencia profesional, en la que el candidato tendrá que demostrar su capacidad para desarrollar dichas habilidades y que se hará a través de entrevistas personales, pruebas que simulen situaciones de trabajo u observaciones reales en su puesto de trabajo. La última fase es de acreditación y registro de la competencia profesional para todos aquellos candidatos que hayan superado la evaluación.
Itinerarios para completar la formación
El consejero destacó la orientación profesional como un aspecto muy importante de este procedimiento, ya que permitirá diseñar itinerarios a los trabajadores que superen la evaluación para que completen la formación conducente a un título de formación profesional o a un certificado de profesionalidad.
Por su parte, aquellos trabajadores que no logren acreditar su competencia recibirán la orientación sobre las posibilidades de formación que deberían cursar para poder acreditarla en posteriores convocatorias.
Sotoca destacó que "el objetivo es que todos los trabajadores que no disponen de ningún reconocimiento oficial puedan acreditar las competencias que han adquirido a través de la experiencia laboral o de diferentes vías de formación".
Guías de información
La Consejería ha elaborado dos guías informativas para dar a conocer este procedimiento. Una de ellas está dirigida a los propios trabajadores y destinatarios del procedimiento, en la que se incluye toda la información que, con carácter general, necesitan para solicitar la acreditación de sus competencias.
La otra guía se dirige a los profesionales dedicados a la orientación, para que dispongan de toda la información acerca de dicho procedimiento y puedan orientar a los trabajadores sobre su estructura y sus efectos.