La Federación de Enseñanza de CCOO Región de Murcia expresa su sorpresa por el desaire que reciben nuestras Escuelas Oficiales de Idiomas (EEOOII) tras el anuncio de la Consejería de una “evaluación externa” para aquellos alumnos que quieran acreditar y certificar su nivel de idiomas. Es evidente que a la hora de establecer este procedimiento, amparado por la LOE, las EEOOII no han sido consultadas de manera seria. Al margen de la facultad legal del responsable de Educación para acometer este proyecto, desde el punto de vista político se trata de una decisión hiriente para los profesionales de la propia Consejería, que se ven relegados por el hecho y por las formas.
Esta Federación considera sorprendente que se opte por la homologación del nivel de competencia a través de instituciones extranjeras cuando nuestras Escuelas Oficiales de Idiomas son las competentes para expedir certificaciones oficiales.
Sin dudar en modo alguno acerca del prestigio de las instituciones seleccionadas por la Consejería para esta homologación de títulos, creemos necesaria una rectificación para otorgar a nuestras Escuelas Oficiales de Idiomas las competencias que les corresponden y no quedar en un segundo lugar. También nos parece excesivo, por tanto, el esfuerzo económico que con dinero público deberá realizar la Consejería para una labor perfectamente atribuible a los servicios que ella misma dispensa. Sospechamos que la profesionalidad y el rigor de los profesionales de las EEOOII a la hora de preservar los niveles educativos exigibles puedan romper alguna estadística.
Pedimos a la Consejería una rectificación para que las Escuelas Oficiales de Idiomas no queden relegadas en ese gran programa por el bilingüismo en la Región de Murcia, que CCOO apoya como inversión educativa de primer orden. Sin embargo no podemos limitarnos a que la excelencia educativa dependa de altisonancias como la “evaluación externa”, el prestigio de otras instituciones o los miles de alumnos involucrados.
Por otra parte, pedimos al responsable de nuestra Consejería un esfuerzo para implantar el nivel C1 en nuestras Escuelas Oficiales de Idiomas, como ya existe en otras Comunidades Autónomas. Muchas Universidades y exigen este nivel para diversas actividades y programas europeos y de esta forma nuestra calidad educativa estará al nivel deseable.