La Dirección General de Patrimonio Natural y Biodiversidad celebró esta semana, en el Centro de Visitantes El Valle, la tercera edición del curso sobre ‘Líneas eléctricas aéreas y protección de la avifauna’, que contó, al igual que en las anteriores convocatorias, con una elevada participación de agentes medioambientales y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.
El director general Pablo Fernández, explicó que “la electrocución y la colisión son las principales causas de mortalidad no natural de muchas especies de aves en la Región” y añadió que “el grupo más afectado es el de las rapaces, que suelen utilizar los apoyos como posaderos, mientras que otras aves, como las esteparias y gregarias, se ven más afectadas por la colisión con cables de tierra y conductores”.
No obstante, según Fernández, “en los últimos años se ha avanzado considerablemente en el desarrollo de nuevos sistemas técnicos que resultan más adecuados para minimizar el impacto negativo en las aves, que han sido implantados en algunas líneas eléctricas de la Región y se han mostrado muy efectivos en la reducción de la mortalidad”.
Así, a través del proyecto LIFE de conservación del Águila Azor Perdicera (Hieraaetus fasciatus), en la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) Sierra de Almenara, Moreras y Cabo Cope se corrigieron 89 apoyos y se señalizaron un total de 10.614 metros de cables mediante espirales salvapájaros para aumentar su visibilidad.
Igualmente, a través del proyecto LIFE sobre ‘Corrección de tendidos eléctricos en las ZEPA de la Región de Murcia (2007-2010)’, se continúa corrigiendo apoyos peligrosos para la avifauna, con la participación de Iberdrola.
Dentro de esta línea, se trabaja en cinco de estas zonas: La Muela-Cabo Tiñoso; Monte El Valle y Sierras de Escalona y Altaona; Sierra de Mojantes; Sierra Espuña; Sierra del Gigante-Pericay; Lomas del Buitre-Río Luchena y Sierra de la Torrecilla.
Pablo Fernández concluyó que su departamento tiene previsto invertir en los próximos cuatro años 1,5 millones de euros, procedentes de fondos europeos Feder, para la corrección de apoyos peligrosos para las aves.
Análisis de la problemática
Durante el curso los agentes pudieron conocer en detalle estos proyectos, así como los elementos constructivos de las líneas eléctricas y las prescripciones técnicas más seguras para la avifauna. También se abordó en una sesión práctica el estudio de los signos clínicos de electrocución y colisión, en una visita al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre El Valle.