En su segundo día, los más de 150 delegados sindicales han participado en el desarrollo de las distintas ponencias y asistido a un cine-fórum de temática social
Durante todo el día de hoy, los más de 150 delegados sindicales venidos de todos los puntos de la Región, han participado en las distintas Jornadas que UGT está celebrando en la localidad de San Pedro del Pinatar. Cinco han sido los bloques de temáticas en los que se han dividido las jornadas: Salud Laboral en el sector sanitario, Igualdad efectiva en el empleo, Acción Sindical y Negociación Colectiva, Inmigración y mercado laboral en la Región de Murcia, Prevención de Riesgos Laborales en el sector sanitario y Prevención de Drogodependencias en el ámbito laboral.
En la jornada de Salud Laboral, el Secretario del Sector Sanidad de la FSP-UGT de la Región de Murcia, Vicente Llorca, basó su intervención en la gestión preventiva y las condiciones laborales en el ámbito sanitario, apuntando que es el empresario el que, en todo caso, “deberá garantizar la seguridad y salud de los trabajadores en todos los aspectos relacionados con el trabajo”. Llorca ofreció datos interesantes tales como que en España, fallecen dos trabajadores al día, que se producen 18 accidentes graves cada día y que 245 profesionales han sufrido algún tipo de agresión en lo que va de año en nuestro país. En este sentido, el delegado sindical recordó el caso de la médico María Eugenia Moreno asesinada en el municipio de Moratalla el pasado mes de marzo, mientras cumplía una guardia médica.
Por otra parte, la jornada de Igualdad contó con la participación de la Secretaria para la Igualdad de UGT Confederal, Almudena Fontecha, quien efectuó un exhaustivo recorrido por los retos y avances de la Ley de Igualdad, aprobada en 2007 y que todavía hoy, tiene mucho camino que recorrer. Fontecha aseguró que en España “tenemos mayores tasas de inactividad y desempleo a pesar del aumento de la inserción laboral de la mujer” dado que hasta hace bien poco, “no hemos sido un país que haya apostado por facilitar la conciliación laboral de la mujer; de ahí que, en su momento, se optara por la mano de obra extranjera, para no tener que privar a las mujeres de seguir cumpliendo con sus obligaciones”. Sin embargo, continuó, “todavía hay empresarios que se atreven a cuestionar que una mujer pueda quedarse embarazada sólo por disfrutar de los cuatro meses de maternidad; circunstancia por la que se siguen contratando a más hombres que mujeres”.
También Fontecha apuntó datos tan alarmantes como que todavía existe “hasta un 40% de diferencia salarial entre trabajadores nacionales y extranjeros, o que las mujeres siguen cobrando un 30% menos que sus compañeros varones sólo por cuestión del sexo, realizando el mismo trabajo”.
El encargado de actualizar los conocimientos de los delegados sindicales en materia de inmigración, fue, entre otros, el Director General de Trabajo de la Consejería de Empleo y Formación, Fernando José Vélez, que ahondó en el importante incremento de la economía sumergida explicando que en la Región, más de 2.400 trabajadores se encontraban fuera del sistema de la Seguridad Social de 2008, “cifra que ha aumentado hasta los 3.000 en lo que va de año”. Del mismo modo, apuntó que las desoladoras listas del paro se están cebando aún más con la población inmigrante, “muestra de ello”, explicó, “es que, tal y como arrojó la EPA del tercer trimestre de 2009, si el paro de la población general ha aumentado en un 24%, lo ha hecho en un 36% en el colectivo inmigrante”.
Exactamente lo mismo ocurre cuando hablamos de la tasa de temporalidad a nivel regional, “siendo de un 32% en la población general y de un 54,31% en la población inmigrante”, apuntó Vélez. Sin embargo, el dato más alarmante ha sido el que ha vislumbrado respecto al registro de los accidentes laborales entre los trabajadores inmigrantes. Así, como ejemplo, indicó que por cada mil trabajadores del sector de la construcción en la Región, “los trabajadores autóctonos sufren un 116,9% de los accidentes, mientras que los trabajadores extranjeros aumentan la cifra hasta llegar al 141%”.
No menos interesante resultó la jornada de Acción Sindical y Negociación Colectiva, en la que los trabajadores del Gabinete Técnico de UGT en Murcia, Silverio Mira y Raquel Pujante, efectuaron un brillante discurso sobre la situación y la perspectiva económica y laboral de la Region, apuntando que entre los años 2000 y 2007, y debido al boom de la construcción, en España se llegaron a crear 4.700.000 empleos, mientras que la población activa crecía en 4.100.000. Conclusión: se creaba más empleo del que se podía realmente cubrir pero en condiciones temporales y precarias que, con el tiempo, demostraron su poca resistencia en el mercado de trabajo y en esta carrera inmobiliaria, la Región de Murcia no se quedó atrás. De hecho, cada nuevo empleo generaba una riqueza regional de un 17,3% menos que la media nacional y nos convertimos en una de las regiones menos productiva de todo el panorama nacional.
La jornada más dinámica resultó ser la de Prevención de Drogodependencias en el ámbito laboral y en la que el consultor en Participación Social y Tercer Sector, Juan Francisco Berenguer, fue capaz de llamar la atención de los más de 30 delegados sindicales que, por grupos, trabajaron en abordar cuestiones que en ocasiones se ocultan o se circunscriben en el ámbito privado o personal como ocurre con el caso de las drogas. En este sentido, Berenguer explicó que el consumo de alcohol y el tabaco son los más comunes entre los trabajadores y alertó sobre el importante hecho de que los representantes de los trabajadores estén formados e informados correctamente sobre esta problemática que tanto puede afectar a la productividad de una empresa y, sobre todo, al clima de la misma.
Esta tarde, en una jornada más distendida, los delegados han participado en un cine forum en el que se ha proyectado la película “Norma Rae” del director estadounidense Martín Ritt, basada en la historia real de una trabajadora del sector textil que con la ayuda de un activo sindicalista, lograr cambiar la mentalidad y el modo de enfrentarse de los trabajadores a los empresarios en una época de masiva represión de derechos laborales.