El consejero José Ballesta subraya que las conclusiones del estudio “han de ser el punto de partida de un plan de inversiones urgente en la red ferroviaria del eje Mediterráneo y su área de influencia”
El consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José Ballesta, y el secretario general de Ferrmed, Joan Amorós, presentaron hoy las conclusiones de un estudio europeo sobre el desarrollo del gran eje ferroviario de mercancías Escandinavia-Rin-Ródano-Valencia-Murcia-Algeciras, por el que la Región pasará a formar parte de las principales plataformas logísticas de Europa e incrementar así las exportaciones de productos regionales hasta un 60 por ciento. Estas conclusiones fueron presentadas ayer al presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel, que recibió a los miembros de la asociación.
El consejero subrayó en primer lugar que las conclusiones del estudio, llamado ‘Supply and Demand, Technical, Socio-economic, and Environmental Global Study of the Ferrmed Great Axis Rail Network and its area of influence’, “han de ser el punto de partida de un plan de inversiones urgente en la red ferroviaria del eje Mediterráneo y su área de influencia, que debe comenzar con la declaración de proyecto prioritario por parte de la Comisión Europea”.
Por esta razón, durante el periodo de mandato español, el Gobierno central “debe enfrentarse al reto de impulsar este verdadero eje integrador de la Unión Europea, que no sólo traería grandes beneficios sociales y económicos a los estados miembros a corto y medio plazo, sino que supondría la estructuración definitiva de la Red Transeuropea de Transporte y mejoraría la logística derivada de ésta y la competitividad de los mercados europeos de transporte de mercancías y, en especial, de la Región”, reiteró José Ballesta.
“De esta forma, la Región quedaría integrada en una plataforma de comercio internacional de primer orden y se favorecería la apertura de nuestra comunidad a los mercados europeos, potenciando la competitividad de los diferentes sectores productivos de la economía regional, impulsando el comercio exterior y la creación de empleo a través una conectividad total con el mercado único europeo”, añadió José Ballesta.
Por otro lado, el secretario general de Ferrmed indicó que el contenido general del estudio, con las conclusiones y recomendaciones, fue presentado el pasado 27 de octubre ante el Comité Económico y Social Europeo de Bruselas, al igual que el listado de acciones concretas que propone la asociación en España y el Norte de África, documentos que se presentarán próximamente en una reunión con mandatarios europeos.
Así, entre las acciones incluidas en el estudio para la mejora del transporte de mercancías en la Región destaca la conexión de Murcia con AVE hacia Valencia y Andalucía, la instalación de doble vía de ancho internacional electrificada para trenes de alta velocidad de pasajeros a 300-350 km/h y de otra para trenes de mercancías a lo largo de todo el Eje, la construcción de un by-pass que evite el paso de mercancías peligrosas por la ciudad de Murcia, la mejora del acceso al Puerto de Cartagena y la construcción de terminales intermodales de gran capacidad en los núcleos de comunicación Murcia-Cartagena y Lorca-Puerto Lumbreras, entre otras.
Mejoras económicas y ambientales
El corredor Mediterráneo tiene capacidad para absorber el 35 por ciento del tráfico terrestre de larga distancia. Se trata de un eje estratégico que representa, respecto al conjunto de España, el 50 por ciento de la población y del PIB, cerca del 60 por ciento de las exportaciones a Europa y la mayor parte del tráfico intercontinental con Asia y el Norte de África.
El consejero concluyó que “este corredor, que comunica todo el continente europeo, está integrado en nuestro país por las comunidades de Murcia, Valencia, Cataluña, Andalucía e Islas Baleares, y es el eje vertebrador del Arco Mediterráneo español, lo que supone un factor determinante en el desarrollo de la economía de nuestro país y de la Región por su elevada incidencia socioeconómica e intermodal, el gran potencial de interconexión a través de los enlaces en red y las conexiones intercontinentales, el aumento de la inversión y la disminución de las emisiones de dióxido de carbono, que podrían reducirse hasta 900.000 toneladas al año en Europa”.