Para Valcárcel, la derogación del trasvase del Ebro supuso el inicio de un “rosario de errores voluntarios” al que el Gobierno socialista quiere añadir el “cierre del grifo del Tajo, un río de todos los españoles”
El presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, calificó hoy de “lamentable” que no se haya conseguido un acuerdo en el Congreso en relación al trasvase Tajo-Segura “por el empecinamiento del Partido Socialista, que no ha querido ceder en lo que era lógico que se cediera”, en referencia a la modificación del texto de la propuesta de Estatuto de Castilla-La Mancha para que no apareciera el año 2015 como fecha de caducidad del trasvase.
Para Valcárcel, quien hizo estas declaraciones en Bruselas, a preguntas de los periodistas, durante la celebración del Día Europeo de las Emergencias, la decisión de Rodríguez Zapatero de “cercenar la posibilidad de trasvasar agua desde el Ebro” supuso el inicio de un “rosario de errores voluntarios” al que el Gobierno socialista quiere añadir ahora el “cierre del grifo del Tajo, un río que es de España y, por lo tanto, de todos los españoles”.
El jefe del Ejecutivo regional subrayó que el trasvase del Ebro, “cuyas obras ya habían comenzado y que fue derogado por los socialistas, habría solucionado, junto al Tajo-Segura, el problema del déficit hídrico en el arco mediterráneo, pero la política torpe e interesada de Rodríguez Zapatero, que ha buscado más el interés partidista que el general, ha agravado la situación”.
El presidente resaltó que “esta ha sido la actuación del PSOE, que ampara al Gobierno de España, y no la del PP, que es precisamente el que ha negado cualquier posibilidad de caducidad del trasvase Tajo-Segura”.