La Consejería de Desarrollo Sostenible y Ordenación del Territorio, a través del Programa de Voluntariado Ambiental de la Dirección General del Medio Natural, retoma este mes y hasta final del año ocho programas de acciones de conservación y restauración de hábitat. Todos ellos se realizan en espacios naturales de la Región y los voluntarios contribuyen con su trabajo a la gestión de los mismos.
El director general del Medio Natural, Rodrigo Borrega, destacó que “la colaboración desinteresada de los ciudadanos comprometidos con el medio ambiente es fundamental para el funcionamiento de los espacios naturales protegidos y la figura del voluntario ambiental. Además, su actitud altruista, que difunde poco a poco en la sociedad, es la mejor garantía para la conservación del patrimonio natural. Estas acciones van destinadas a toda la población, pero hemos detectado que cada vez son más las personas con titulación superior relacionada con materias medioambientales las que se unen a los programas de voluntariado ambiental”.
El Programa de Voluntariado Ambiental está estructurado en torno a una serie de Proyectos de Acción en diferentes Espacios Naturales de la Región. Cuenta, además, con actividades paralelas, tales como acciones formativas, campos de trabajo, visitas guiadas en el medio natural, e intercambios y sinergias con otros grupos ambientales y programas de voluntariado ambiental.
Entre los programas de acciones de la Red de Voluntariado Ambiental se encuentran el Proyecto Artemia de conservación y restauración de ecosistemas del litorales con seguimientos de la flora y la fauna; el Proyecto Bubo, que se desarrolla en el Parque Regional de Sierra Espuña, y que consiste en la adecuación de puntos de agua para anfibios, búsqueda de rastros de tejones y seguimientos de aves nocturnas; el Proyecto Cicindela de acciones de mejora de hábitat y seguimiento de fauna en humedales protegidos; o el Proyecto Eusimonia de estudio de la aracnofauna singular del sureste peninsular
“Asimismo, otros proyectos son el Hippocampus, centrado en el caballito de Mar; el Hydrobates, para el control y anillamiento científico de las aves migratorias; o el Thader, que se desarrolla en el río Segura y sus afluentes, y consiste en el seguimiento de las poblaciones de nutrias, que se realiza mediante la observación de excrementos y huellas, pues su conducta, un tanto esquiva, hace difícil su observación. Por último, está el Programa Lafuentea de seguimiento y acciones de conservación de las comunidades vegetales y flora protegida del Parque Regional de El Valle y Carrascoy. En definitiva, un amplio abanico de actividades en las que esperamos que participen muchos voluntarios”, indicó el director general del Medio Natural.
Pueden participar en el Programa todas aquellas personas mayores de 18 años de edad, o mayores de 16 con autorización de los padres o tutores, que quieran contribuir en la mejora ambiental del medio natural, tras rellenar, firmar y enviar una ficha de inscripción que se puede obtener a través de la página web www.carm.es/siga/Voluntariado/css/index.html, el correo electrónico voluntariadoambiental@listas.carm.es, o bien solicitándola vía telefónica al teléfono 647323943.
Foto: Imagen de los voluntarios del Proyecto Thader, consistente en el seguimiento de las poblaciones de nutrias de la Región.
