Madrid, 31 jul (EFE).- La Policía ha desarticulado una organización dedicada a la falsificación de documentos y a las estafas mediante la compra fraudulenta de vehículos y otros bienes y ha detenido a 21 de sus integrantes, a uno de ellos en Murcia, quienes presuntamente han defraudado más de un millón de euros a entidades financieras.
Según informa la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, los arrestados -de nacionalidad brasileña- confeccionaban documentos falsos con los que pedían créditos para la compra de turismos y tras abonar únicamente la entrada éstos eran vendidos.
La operación ha sido llevada a cabo en Barcelona (2 detenidos), Hospitalet de Llobregat (1), Girona (5), Olot (2), Figueras (2), Lleida (1), Salamanca (4), Arganda del Rey (Madrid) (3) y Murcia (1) y los agentes han intervenido en total 24 vehículos.
A los detenidos se les imputan, entre otros, los delitos de falsificación documental y estafa.
La investigación comenzó el pasado mes de noviembre tras la denuncia presentada por el apoderado de una empresa financiera, quien alegó que había sido víctima de varias operaciones fraudulentas de compra de vehículos.
Los coches habían sido adquiridos en concesionarios de la provincia de Girona y, tras un primer análisis, se pudo constatar que la documentación aportada era falsa.
Posteriormente, la Policía averiguó que el grupo estaba formado por un grupo de brasileños con varias personas al frente que actuaban desde Brasil.
Los investigadores identificaron a veintiún miembros de la red que residían en Cataluña, se desplazaban a distintas provincias para cometer las estafas y tenían perfectamente repartidas las tareas.
Así, unos se dedicaban a confeccionar los documentos falsos (cartas de identidad portuguesas, carnés de conducir, permisos de residencia, nóminas, contratos y certificados de NIE) y otros abrían las cuentas corrientes y solicitaban los créditos para comprar artículos electrónicos y vehículos, principalmente.
El "modus operandi" era el siguiente: una vez que habían confeccionado los documentos falsos acudían a los concesionarios para adquirir los coches a nombre de personas ficticias, pagaban la entrada y para el resto del importe solicitaban créditos rápidos a través de empresas financieras, a las que engañaban presentando nóminas con sueldos muy elevados.
Después requerían que los trámites de titularidad de los automóviles se hicieran con urgencia y así los vendían de forma inmediata.
Los coches eran vendidos y las financieras, por su parte, se quedaban sin cobrar, ya que era imposible encontrar al primer comprador.
En la operación se han intervenido, además de 24 vehículos, diez permisos de residencia española, permisos de conducir de Portugal, Brasil e Italia, entre otra documentación, una fotocopiadora y una cámara de fotos.
La operación ha sido realizada por la Brigada de Falsedades de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, junto con agentes de las UCRIF de Barcelona y de Girona. EFE