La Dirección General de Planificación Sanitaria y Política Farmacéutica de la Consejería de Sanidad ha realizado un estudio pionero en la Región para determinar la calidad de vida de los pacientes de Diabetes de nuestra comunidad. El objetivo de este trabajo es evaluar la calidad de vida relacionada con la salud de los diabéticos de la Región de Murcia, sin dejar de lado la detección de posibles desigualdades de salud y de factores asociados a éstas (características sociodemográficas y económicas, hábitos de vida y utilización de servicios sanitarios). Se inicia así una línea de trabajo en investigación de resultados de salud centrados en calidad de vida, que además servirán para mejorarla una vez analizados los resultados del estudio.

El estudio ha sido realizado mediante una encuesta de salud que se hizo durante el año 2006. La población de estudio fueron diabéticos tipo 1 y 2, mayores de 17 años. El número de diabéticos por área de salud se redondeó a 250, con un total regional de 1.500 diabéticos. Para reconstruir los estratos se ponderó la muestra por el peso real que cada área de salud tiene en el total poblacional de la Región.

Accedieron a participar en el estudio 1.483 diabéticos, de los que 1.466 (98,8 por ciento) contestaron a la totalidad de las preguntas. La media de edad fue de 66,4 años y el 46,8 por ciento fueron hombres. Para ambos sexos, la evolución media de la enfermedad fue de 10,07 años. Se observó una alta proporción de diabéticos de edad avanzada, sin estudios, casados y con actividad económica pensionista. Más de la mitad de los encuestados afirmó no haber fumado nunca (53,5 por ciento) y algo menos de la mitad, no haber consumido nunca alcohol (47,3 por ciento). En cuanto a la actividad física realizada en el ámbito laboral, un 54,5 por ciento manifestó que consistía en desplazarse sin realizar esfuerzo físico. El 68,6 por ciento declaró realizar actividad física en su tiempo de ocio.

Un 69,4 por ciento de diabéticos dijo haber consultado con un médico (de AP o AE) por algún problema de salud en el último mes. En este periodo, acudieron alguna vez a consulta de atención primaria, el 60,6 por ciento de los diabéticos y a consulta de atención especializada el 22,9 por ciento. Un 18,3 por ciento de los diabéticos declaró haber sido hospitalizado en el último año; estas hospitalizaciones fueron, principalmente, para recibir tratamiento sin intervención quirúrgica (37 por ciento) o para la realización de una intervención quirúrgica (34,6 por ciento). En el índice de salud físico, un 34 por ciento de los diabéticos manifestaron presentar buena calidad de vida y en el índice de salud mental, un 57,2 por ciento.

Comparados con aquellos diabéticos que estaban tratados sólo con insulina, el índice para los que realizaban sólo dieta y ejercicio fue 2,6 veces mejor y 1,9 veces mejor en los que sólo estaban medicados con antidiabéticos orales. Aquellos diabéticos cuya actividad física laboral era caminar o hacer grandes esfuerzos presentaron 2,5 veces mejor índice que los que realizan una actividad física laboral sedentaria o de pie. Aquellos que afirmaron practicar actividad física en tiempo de ocio, obtuvieron un índice 2,3 veces mejor que los que dijeron no practicarla.

Los hombres obtuvieron mejor índice en salud mental que las mujeres (2,4 veces más). Comparando con los diabéticos que estaban tratados sólo con insulina, el índice fue 1,4 veces mejor para los que estaban medicados sólo con antidiabéticos orales. Aquellos diabéticos que practicaban actividad física en su tiempo de ocio presentaron 1,4 veces mejor salud mental que los que no la practicaban. Tomando como referencia el nivel de estudios los que sabían leer y escribir, aquellos con estudios primarios y aquellos con estudios superiores, tuvieron respectivamente, 1,6, 1,5 y 1,9 veces mejor índice. Por último, comparado con los diabéticos que estaban separados y divorciados, los solteros presentaron 4,0 veces mejor índice de salud mental y los casados 2,7 veces más.

Los resultados del estudio ponen de manifiesto la inexistencia de desigualdades en cuanto a la organización territorial de la asistencia sanitaria de la Región. No obstante, se han detectado desigualdades en salud asociadas a determinantes socioeconómicos, al sexo, al estado civil, al tipo de tratamiento relacionado con la diabetes mellitas y a la realización de ejercicio físico. Con todo ello, la evaluación de la calidad de vida del diabético parece un proceso idóneo para la identificación y monitorización de desigualdades en salud y de utilidad en la elaboración de programas sanitarios y estrategias de salud, ya que facilita la identificación de poblaciones diana.

La relevancia de la diabetes como enfermedad crónica, va más allá del ámbito individual y asistencial del diabético, constituyendo uno de los principales problemas de salud de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, y como tal, es abordado en el Plan de Salud 2003-2007. En este contexto han surgido varias iniciativas, como el estudio DINO (Diabetes, Nutrición y Obesidad en la Población adulta de la Región de Murcia) y el Plan Integral de Atención al Diabético 2005-2009, que contempla entre sus líneas de actuación, la evaluación de la salud de los diabéticos en la Región.