Incultura española

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Incultura española

"A más Universidades más tarugos en flor". Esto es lo que más de un catedrático universitario me lleva diciendo desde hace unos años a esta parte y, razón llevan. España ha sido un auténtico hervidero, un flamante vergel a lo largo de los siglos de grandes personalidades que han dejado su impronta tanto en España como en Europa, pero todo ha sido ladeado, así, de "memoria histórica" según qué. El mundo de la llamada izquierda ya se ha encargado de ello siempre y cuando no llevase el matiz "cristiano" y, los mundos de la derecha, si me apuran también. Tema a tener presente aunque los hay, la mayoría de los cristianos han optado por no ocupar lugares importantes en el mundo cultural, ni sus estudios han servido para promocionar la cultura española y, como decía un buen amigo, se han dedicado a "su misa y a su María Luisa". Un cristianismo mal documentado y, mal entendido. Ellos se lo han buscado.

El ciudadano de a pie a lo largo de los últimos años, ha optado por los deportes en general, los toros, las damas y el dominó, las diversas juergas, los viajes a los paraísos más lejanos y todo lo que les venga a ustedes a la cabeza en este momento. La lectura de grandes libros, los buenos documentales, la misma prensa u otros no han sido bocado gustoso. Los estudios universitarios, las escuelas de primaria y todo este ajuar delicado ha caído por su propio peso y, con ellas, nuestro joven profesorado, entra a las aulas, muchos de ellos, sin saber lo que vale un peine. En los dos últimos años hemos tenido dos años internacionales dedicados a grandes pintores universales: Pablo Picasso el año 2022, y el 2023, en el que estamos, Año Internacional de Joaquín Sorolla. Que yo sepa, a fecha de hoy, en la ciudad mediterránea donde vivo "ni un meñique para enaltecer a estas grandes figuras.

Podríamos ir siguiendo y nos faltarían tiempo y páginas ante la indiferencia que estamos viviendo incluso desde poderes muy dispares. Todos ellos, sin duda, ni un atisbo cultural a sus espaldas. ¡Menuda memoria histórica les vamos a dejar a las siguientes generaciones! Existen dos grandes autores que son de tan alta estima como los citados anteriormente desde el mundo de la pedagogía. Por supuesto, no me extraña que de ellos no sepan absolutamente nada: San José de Calasanz, de Peralta de la Sal (Huesca) y el Padre Andrés Manjón ( Burgos). El mundo cristiano en sus épocas cercanas era un auténtico avispero que conmocionaba a unos y a otros y, aunque todo ello se ha ido al garete aún quedamos unos pocos que, gracias a nuestros estudios y seguimiento de las diversas líneas pedagógicas y el bien que han realizado a Europa es imposible olvidar. La mayoría de los periodistas, sobre ello, ni una sola mueca.

Hace pocos años, en plena cuesta del Sacromonte de Granada y poder ver la majestuosa procesión del miércoles santo del Cristo de los Gitanos, la cual concluye de madrugada en la Abadía del Sacromonte, ahí mismo, muy cercano a Miguel Ríos y sus colegas, me daba cuenta que estaba situado junto a la Fundación de las Escuelas del Ave María, ¡nada más y nada menos! La emoción que me embargaba ni se lo creen. Allí estaban las primeras piedras de lo que Andrés Manjón y Manjón: jurista, sacerdote, pedagogo reconocido y pionero social iniciaba y que este año, 2023, se cumple el centenario de su muerte. Para los incultos de las Facultades de Pedagogía y Magisterio, en 1918 abría tales escuelas en 36 provincias españolas, sin olvidarnos que, a lo largo de su vida, se abrieron 400 escuelas por todo el mundo, que aplicaban métodos novedosos para su época. Estas escuelas eran gratuitas y se financiaban con donaciones. Tal era así que recibió de toda Europa visitas de pedagogos e impulsores de alfabetización para ver el milagroso desarrollo que se llevaba entre manos tal sacerdote pedagogo. Subió como la espuma el hecho pedagógico que allí se estaba aplicando e incluso, por su mente brillante, rechazaría las propuestas a rector y decano de algunas universidades. Sí en cambio aceptaría ser nombrado en 1908 académico de la Real Academia Española.

¿Con todo esto dónde queremos llegar? A que nuestra Memoria Histórica, desde todas las artes y oficios españoles siempre han sido auténticas estrellas nacidas desde los lugares mas farragosos por los que ha pasado España. Han surgido cabezas prodigiosas y mentes fuera de serie que en su momento fueron verdaderos artistas del saber, del enseñar y siempre para la mejora de los demás. Ahora, los diversos individualismos hacen de la cultura verdaderos cajones estancos y los cerramos a cal y canto.

Dios quiera que el Humanismo Cristiano, el cual vuelve a renacer de nuevo en España, acierte de pleno y vuelva a resurgir tanto bueno por lo que congratularnos. Yo lo tengo claro para estos meses estivales: el mundo de la cultura en España y en Europa. Espero que todos ustedes, este verano, sepan acercarse a buenos libros que, al menos, les puedan servir para cómo sacar adelante una buena familia y muy alejados de todo tipo de ideologías. Felices vacaciones y no perdamos la esperanza.

MARIANO GALIÁN TUDELA

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