Observar quien te tiende la mano

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Observar quien te tiende la mano

"Recuerdo que un día un capataz me dio en secreto un trozo de pan que debió haber guardado de su propia ración del desayuno. Pero me dio algo más, un "algo" humano que hizo que se me saltaran las lágrimas: la palabra y la mirada con que aquel hombre acompañó el regalo-." Viktor Frankl

Cuando Frankl recibe el chusco de pan, no sólo ve eso, sino que ve algo más: ve algo inmaterial, algo específicamente humano. El pan le dará energía a su organismo para seguir adelante por un tiempo. El pan porque tiene calorías. Lo humano porque alimenta su espíritu.

En ocasiones cuando alguien da es porque tiene algo "dentro", y en el "tener" surge la necesidad de "dar". Todo lo que poseemos está en función del ofrecer al otro todos y cada uno de los valores que se nos ha concedido. No tiene sentido el tener para guardar simplemente. Estamos llamados a "dar".

Somos personas necesitadas, desde que nacemos hasta la muerte; necesitamos ir adquiriendo recursos, tanto materiales como emocionales para seguir creciendo como personas. Necesitamos crecer junto a un tú, y por esta razón, es necesario el recibir y el dar. En esta retroalimentación de intercambio afectivo y de valores es lo que nos hace crecer como personas.

Si somos capaces de "observar", podremos comprobar que hay muchos "ángeles" a nuestro alrededor que nos van ofreciendo el "pan" de la amistad, la alegría, la ayuda, la compasión y la entrega generosa de su propia vida. La capacidad de "observar" el alma sólo la tiene el ser humano.

La observación es una capacidad o mirar algo o alguien con mucha atención y detenimiento para adquirir algún conocimiento sobre su comportamiento o sus características. Observar al otro, descubriendo sus valores. Todos somos portadores de aquellos elementos que nos hacen más humanos, que nos facilitan la interacción entre uno y otros.

Podemos observar mirando o viendo. Un ciego no ve, pero mira desde el corazón; es capaz de captar la sensibilidad de la persona que tiene cerca. En distintas ocasiones vemos, pero no miramos, estamos absortos en nuestras ideas, en la forma de pensar de uno o de otros, en nuestras incompatibilidades con la vida. Creemos que miramos, pero no vemos desde el alma, desde lo más profundo de nuestro corazón la sensibilidad del otro, y como siempre indico, los más cercanos a nosotros: nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros amigos, nuestros compañeros, etc.

Viktor Frankl "miraba" desde el corazón, es lo que hace el sufrimiento. Era capaz de observar la dulzura, la generosidad en medio del dolor. Por ello, habla del "sentido en la vida", porque contemplando el mundo que nos rodea, nos damos cuenta que tenemos una misión y que nos ofrece motivos para seguir viviendo. Observar a quien te tiende la mano, al que te ayuda, al que te acepta incondicionalmente, aunque te creas la persona más indigna de ser amada. Todo está hecho para ti, con la finalidad de experimentar la liberación en medio de tanta esclavitud.

Miguel Cuartero

Orientador Familiar

Formado en Logoterapia por Asociación Española de Logoterapia Madrid

Teléfono para consultas sobre familia y pérdidas significativas de forma gratuita: 688 935 000. Asociación Viktor Frankl Región de Murcia

Correo electrónico: correo@viktorfranklregiondemurcia.org

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