"Mundial Qatar 2022: La competición más importante de fútbol ya tiene todo listo para la gran cita de hoy domingo; fechas, partidos, estadios y todo lo que hay que saber". Así rezan todos los anuncios del Mundial de Fútbol pero en ningún momento, por ahora, se ha dicho todo lo que hay que saber".
Nos encontramos ante el Mundial de 2022 en Qatar, país de escasa tradición futbolística. En los últimos años, varios países del mundo han buscado como "alma que lleva al diablo" algunas competiciones a lugares fuera de nuestro continente con la única finalidad de exportar su producto futbolero y obtener una buena cuantía de petrodólares. La elección de Qatar como sede ha tenido un sabor agridulce para el resto del globo. En 2007 presentaron sus candidaturas Australia, Estados Unidos, Corea del Sur y Japón , pero debido a la regla de rotación, donde se estipula que cada edición se debe disputar en continentes distintos, Estados Unidos se quedaba fuera de lo que correspondía. Qatar no poseía en ese momento ninguna infraestructura ni estadios necesarios de tal envergadura. Pero una vez más, el petróleo y algo más ganaba la partida.
Así las mayores críticas a este torneo se han centrado en las restricciones de derechos y libertades en Qatar, que se ponen en evidencia con ocasión del Mundial. Nicolás Sarkozy, investigado por la justicia de su país por su intervención en la elección de Qatar, elogiaba en su día la decisión. Se celebraba pues, como una "elección estratégica y política mayor" y, un "reequilibrio" para "un país musulmán que organice por vez primera un evento de tal importancia". Ahora mismo, las leyes y costumbres de tales paraísos poseen tendencias fundamentalistas, lo que ha provocado y con razón, protestas en el extranjero con ocasión de tal Mundial inundado de cavernas del trapicheo. El film del "Padrino" aquí se ha quedado corto.
Sin duda alguna la gran protesta, silenciada por el mundo mediático y la propia FIFA ha sido el trato dado a los trabajadores. Nos encontramos ante una numerosa mano de obra inmigrante, y se trajeron muchos más para las diversas construcciones de tales torneos, pero pronto se desataría el pastel: miles de muertos por accidentes laborales, jornadas de trabajo bajo calor extremo y salarios escasos. A ello hemos de sumarle la cantidad de lagunas, vacíos e imprecisiones dentro del mundo informativo. Revistas de toda Europa aireaban que los mismos trabajadores experimentaron violaciones en sus derechos y, ante salarios y beneficios prometidos de "si te veo no me acuerdo".
Hoy domingo se inicia esta gran película se suspense. El presidente de la FIFA, Joseph Blatter haría hace poco unas declaraciones en las que expresaba que todo esto era "un error y una mala elección". Sin embargo, en ningún momento se pronunciaría sobre ninguna de las polémicas mencionadas. Estamos ante un Mundial inminente, y parece que sobre los aspectos oscuros se impone la necesidad de disputarlo sin mirar atrás.
Luis Enrique, seleccionador español, diría sobre este mundial en Qatar: "A pesar de todas las polémicas que se sabía que se iban a generar, estaba encantado de representar a su país allí donde fuese necesario. "En mi caso, soy seleccionador, no soy político, no tengo ninguna capacidad de decisión y me centro en el fútbol".
Claramente estamos ante "Estadios a costa de vidas" y falta de libertades, pero fútbol ante todo y, más aún, si venimos a casa con los bolsillos forrados aunque sea a costa de vidas. Mientras, los espectadores que verán estos eventos cargados de luces abismales ni por asomo sabrán que bajo tales altares descomunales las cifras de diez mil cadáveres reposan y nos gritan la falta de dignidad que se ha cometido contra ellos. Ya vemos que la falta de moralidad , ética y dignidad hacia nuestros semejantes va cada día más englobando los diversos horizontes de nuestro planeta.
MARIANO GALIÁN TUDELA