En un gesto de solidaridad, El Limonar International School Murcia ha unido esfuerzos con Cáritas para llevar alegría a los niños afectados por la reciente DANA en Valencia. Este año, la tradicional recogida de Navidad ha ampliado su objetivo para incluir la donación de juguetes nuevos destinados a las familias que más han sufrido las consecuencias de la riada.
La iniciativa ha contado con la participación activa de más de 50 familias que han logrado reunir más de 300 juguetes usados y 50 nuevos. La carga, cuidadosamente preparada, ha sido ya entregada en la nave de Cáritas en Sangonera la Seca, un espacio donde desde 2021 se trabaja incansablemente para restaurar juguetes y darles una nueva vida.
Un taller que transforma vidas
El Taller del Juguete de Cáritas es un proyecto que combina tres importantes objetivos: el acompañamiento sociolaboral de mujeres en situación de vulnerabilidad, la sostenibilidad mediante el reciclaje de juguetes y la provisión de material lúdico y educativo para niños y jóvenes. Este espacio no solo recupera juguetes, sino que también da esperanza a un grupo de 15 mujeres, quienes encuentran en estas actividades una fuente de realización personal.
"El trabajo aquí es impresionante. Ver la cantidad de cajas preparadas para ser distribuidas y conocer el enorme esfuerzo que hay detrás, ha sido muy emotivo", explica Jaione Mendoza, coordinadora de Infantil y responsable de la iniciativa en ELIS Murcia.
El proceso de recuperación de un juguete incluye varias fases: selección, higienización, rehabilitación, clasificación por edad, creación de lotes temáticos y empaquetado. Además, las mujeres del taller confeccionan ropa para muñecas y adaptan los juguetes para garantizar que cada lote sea especial e incluya al menos un libro.
Impacto social y educativo
Desirée Puerta, responsable de Empleo y Formación en Cáritas Murcia, lidera esta admirable labor. Su trabajo ha inspirado incluso talleres educativos dirigidos a alumnos de primaria, fomentando en los más pequeños la conciencia sobre el reciclaje y el cuidado del medio ambiente.
Además, los juguetes recuperados se distribuyen a través de parroquias, centros de acogida y familias necesitadas de toda la región, e incluso apoyan iniciativas en comunidades marginadas. En el caso de Valencia, un grupo de artesanos voluntarios se encarga de recoger y entregar los juguetes a las familias afectadas, ampliando así el alcance de esta campaña solidaria.
"Después de ver in situ la fantástica labor que realiza Cáritas, y emocionarme con el esfuerzo que realiza Desirée y todo su equipo, estoy deseando empezar la V Campaña e involucrar a toda la comunidad escolar, no solo al ciclo de Infantil", añade Jaione Mendoza con entusiasmo.
Con esta iniciativa, ELIS Murcia y Cáritas no solo brindan alegría a los niños, sino que también demuestran cómo la colaboración y el compromiso pueden marcar la diferencia en momentos de necesidad.