El alcalde de Murcia, José Ballesta, acompañado por el concejal de Cultura e Identidad, Diego Avilés, ha visitado la exposición de las obras que la mujer de Ramón Gaya ha donado al museo que la ciudad de Murcia decidió consagrar hace 33 años al pintor murciano más internacional.
En concreto, once obras de la colección privada del pintor, dos óleos y nueve gouaches sobre papel, enriquecerán el Museo Ramón Gaya.
De esta manera, Isabel Verdejo, viuda del pintor murciano, vuelve a mostrar su indiscutible generosidad con la ciudad de Murcia.
Información de las obras que pasan a formar parte del patrimonio de la ciudad de Murcia:
- ‘La mano de Papa Doria' (1999). Un gouache sobre papel que muestra un fragmento del pontífice.
- 'Retrato de Alicia' (1953). Un óleo sobre lienzo. Una obra de vital importancia y trascendencia para el discurso narrativo que persigue el Museo. Se trata de la hija del pintor, fruto de su matrimonio con Fe Sanz, muerta en plena Guerra Civil.
- 'La Venecia de Turner' (1992). Un gouache sobre papel que habla de dos de las grandes pasiones del pintor, la ciudad que le cambió y marcó un antes y un después en su vida.
- 'De Tiziano (la coronación de espinas)' (1990). Un gouache sobre papel. Gaya escribía sobre Tizano: «Es cierto que, después de Tiziano, toda la pintura parece moverse bajo su sombra».
- 'Homenaje a Seurat con peras' (1194). Un gouache sobre papel. En las diferentes visitas a exposiciones impresionistas, Ramón Gaya solía 'salvar' a Seurat. En enero de 1953 se encontró en L'Orangerie (Museo de pinturas impresionistas y postimpresionistas situadas en el Jardín de las Tullerías, París) y anota en su diario: <<Exposición de los impresionistas. . Sólo Van Gogh, Cézanne y... Seurat>>.
- 'De Tiziano. Entierro de Cristo' (1998). Un gouache sobre papel. Nuevamente otro homenaje a ‘el primer pintor moderno'.
- 'Solana y Fattori' (1992). Un gouache sobre papel.
- 'Abanico y espejo' (1992). Un gouache sobre papel. El interior doméstico como referencia y lugar de trabajo. Gaya jamás separó el estudio de su casa, algo que queda patente en obras como ésta.
- 'Japonés pornográfico' (1998) Un gouache sobre papel. Un ‘divertimento' o juego como los llamaba el pintor.
- ‘La jarra' (2003). Un gouache sobre papel. Una de las últimas obras hechas en vida del pintor, ya muy mayor y con menos energía para poder pintar, aunque no menos ganas.
- 'Isabel Verdejo en Grabador Esteve' (1981). Un óleo sobre lienzo. Esta obra de dimensiones considerables guarda la particularidad que Ramón Gaya se la regaló a la madre de Isabel Verdejo. Es un retrato magnífico donde hay también un guiño a ‘La Solana' de Goya, un cuadro que está en el Museo del Louvre y que Gaya consideraba como lo mejor de la producción del artista aragonés.