Cientos de vecinos de Espinardo protagonizan un funeral por la muerte de su calle Mayor como consecuencia del Plan de Movilidad
El concurrido funeral-manifestación contó con tres ataúdes en recuerdo de Espinardo, los árboles y el comercio que se llevará por delante el plan, y un cuarto en homenaje a las restante plataformas del municipio
Los vecinos, ataviados de negro en su mayoría, portaron también coronas, esquelas y velas en una marcha fúnebre al son de las campanas y el tambor
En la protesta también se lamentó la muerte de la participación vecinal en un proyecto que no ha sido consultado con los ciudadanos y que se mantiene a pesar de las más de 4.000 firmas recogidas en el barrio murciano (más de 20.000 en el municipio)
Lamentan que no se haya tenido en cuenta la presencia de centros escolares y el comercio que da vida a la localidad
Pidieron asimismo que se cumpla el mandato del Pleno y se paralicen las obras
Tacharon de ocurrencia y sinsentido la última propuesta de dejar una calle Mayor de sentido único en lugar de desviar los nuevos autobuses por Juan Carlos I
Anoche tuvo lugar el funeral más numeroso que se recuerda en Murcia, porque el fallecido no era una persona sino todo un pueblo, y, especialmente, su calle Mayor.
Y sus vecinos quisieron denunciarlo con un funeral-manifestación al que asistieron cientos de personas.
Tres ataúdes formaron parte del cortejo, representando la muerte de Espinardo, los árboles y el comercio de la localidad, y un cuarto sirvió de homenaje a las otras plataformas del municipio.
Los vecinos, vestidos de negro en su mayoría, marcharon por las calles de Espinardo al son de las campanas y el tambor que tocaban a muerto, portando coronas, esquelas y velas en homenaje a su pueblo.
Lamentaron también la muerte de la participación ciudadana como consecuencia de un plan que no fue consultado con los ciudadanos y que se mantiene a pesar de las más de 4.000 firmas recogidas en Espinardo (más de 20.000 en todo el municipio) y el mandato del Pleno pidiendo su suspensión.
Este cortejo sirvió para denunciar una vez más que no se ha tenido en cuenta la presencia de centros escolares y el comercio a la hora de diseñar el proyecto y tacharon de ocurrencia y sinsentido la última propuesta de dejar la principal arteria de la localidad de sentido único.
Por eso pudieron que se modificara el proyecto, ya que si era posible hacerlo para ampliar o reducir carriles, también lo era para mantener árboles, aceras y aparcamientos desviando los nuevos autobuses por Juan Carlos I.
Desde Espinardo Colapsado quisieron dejar claro que seguirán saliendo a la calle para que su pueblo siga teniendo vida.