Jueves Santo. Totana-2022

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Jueves Santo, 14 de Abril de 2022

Jueves Santo. Totana-2022

Hoy llegamos al quinto día de la Semana Santa: el Jueves Santo.

Como muchos devotos dicen estos días, esta es una Semana Santa muy esperada tras la “pausa” que nos impuso la pandemia. Y aunque los efectos de la pandemia se han aminorado bastante, otros fenómenos imprevistos, dan lugar a que no todo transcurra como nos gustaría.

Domingo de Ramos y Lunes Santo, se celebraron con toda normalidad tanto a nivel procesional como litúrgico. Pero el Martes Santo hubo que interrumpir la procesión debido a la repentina (y abundante) lluvia que comenzó a caer en plena procesión. Esta misma precipitación obligó a suspender la procesión del Miércoles Santo, aunque sí tuvieron lugar las actividades litúrgicas programadas en nuestras dos Parroquias para ese día.

El Triduo Pascual se inicia con la celebración de los Oficios de Jueves Santo. Este es un día de profundas y arraigadas raíces en el pueblo cristiano, por ser el memorial de la institución de la Eucaristía, del lavatorio de los pies, la institución del sacerdocio, y la proclamación del mandamiento del Amor.

¿Qué ocurrió el primer Jueves Santo?

El primer Jueves Santo de la historia, Jesús se reunió con sus Apóstoles en el cenáculo para celebrar la pascua judía y despedirse de ellos.

Antes de sentarse a cenar, Jesús les da una gran lección de humilde servicio lavándoles los pies; instituye la Eucaristía; y los constituye sacerdotes mediadores de su Palabra, de su sacramento y de su salvación.

¿Cómo conmemoramos en Totana el Jueves Santo?

En la mañana del Jueves Santo, el bullicio y el trasiego de gentes en un ir y venir continuo, el traslado de tronos a la iglesia de Santiago, el sonido de las bandas, etc. nos recuerdan el ambiente que habría en Jerusalén hace casi dos mil años, cuando todos los judíos iban y venían sin cesar, ultimando los preparativos para la gran celebración que tendría lugar esa misma noche: la celebración de la Cena Pascual.

En Totana también nos preparamos debidamente para las celebraciones de este día con: los Oficios vespertinos y la procesión de la noche. Y hemos de hacerlo con el claro convencimiento de la importancia de lo que vamos a celebrar: la conmemoración de la Cena del Señor.

Esta es una celebración solemne y emotiva, en la que hallamos resumida toda la doctrina de Jesús en un solo gesto: “partió el pan y se lo dio a sus discípulos”. Con este gesto instituyó la Eucaristía, entregándose en forma de pan y vino para alimentarnos interiormente, en el camino de la vida. Y también nos pide que lo repitamos en conmemoración suya, mediante la entrega y el servicio desinteresado hacia los demás.

Antiguas tradiciones de Jueves Santo en Totana.

En Totana, durante las primeras décadas de la 2ª mitad del pasado siglo XX, existía una costumbre popular –ahora ya desparecida como tal, pero por otro lado adaptada a los tiempos litúrgicos actuales-, que estaba relacionada con una antigua tradición nacida en Roma en el siglo XVI. Esta consistía en visitar las iglesias y capillas de Totana en las que durante la tarde y la noche del Jueves Santo y el Viernes Santo hasta la hora de la celebración de la Pasión, se ponían los llamados Monumentos.

La tradición consistía en realizar un recorrido por los lugares en los que se había creado el Monumento, es decir, los lugares en donde estaba expuesto el Santísimo Sacramento. La tradición romana, hablaba de la visita a las “Siete Iglesias”, número que tenía su origen en el recuerdo de los traslados a los que obligaron a Jesús, desde que fue capturado en el Huerto de los Olivos, hasta que llegó al Calvario: captura en Getsemaní; del Huerto a la casa de Anás; de ahí a la casa de Caifás; de Caifás a Poncio Pilato; de Pilato a Herodes; de Herodes nuevamente a Pilato; y Vía Crucis.

En Totana, el trayecto que realizaban los devotos pasaba por la Capilla de la Milagrosa; por la casa-convento de las Siervas de Jesús (lugar que ya no existe y que se ubicaba en la C/ Mayor Sevilla); por la Parroquia de Santiago y por la Parroquia de las Tres Avemarías. De los visitantes a estos Monumentos, destacaban por su especial devoción y por su característica vestimenta de dolor, las Manolas, que a modo de cortejo fúnebre y recordando a las mujeres discípulas de Jesús, hacían el piadoso recorrido en actitud orante y reflexiva.

Nota: El color litúrgico del Jueves Santo es el blanco (o dorado), color con el que se celebra la institución de la Eucaristía, y simboliza alegría y pureza.

Diego Jesús Romera González

Jueves Santo. Totana-2022 - 1, Foto 1
Jueves Santo. Totana-2022 - 2, Foto 2
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