El Ayuntamiento de Murcia ha lanzado la campaña ‘Quiérete mucho' coincidiendo con la celebración de San Valentín. Teresa Franco, concejala de Igualdad, Juventud y Cooperación al Desarrollo, ha explicado que "el objetivo es ofrecer un modelo alternativo de relaciones sentimentales, principalmete entre la población juvenil, basado en la construcción de relaciones igualitarias, respetuosas, solidarias, tolerantes, comprensivas y críticas, que promuevan por sí mismas la erradicación de cualquier tipo de discriminación y violencia, incluyendo sobre todo la violencia de género. En definitiva, la construcción de relaciones basadas en la igualdad y la no violencia".

La campaña se dirige a la ciudadanía en general a través de la exposición de cartelería en la vía pública con mensajes que permiten analizar de forma crítica los mitos del amor romántico, mensajes tales como:

1. "AMOR a primera vista" VERSUS "ATRACCIÓN a primera vista. El amor se construye día a día".

2. "ES el amor de mi vida" VERSUS "SOY el amor de mi vida".

3. "Sin TÍ no soy nada" VERSUS "Sin MÍ no soy nada".

4. "El amor puede con todo" VERSUS "El amor PROPIO puede con todo".

5. "Ls celos son una prueba de AMOR" VERSUS "Los celos son una prueba de BAJA AUTOESTIMA".

6. "Los que se pelean, se desean" VERSUS "Los que se dean, evitan las peleas".

Guía para los centros educativos

De forma más específica, la campaña se dirige a la población juvenil mediante la distribución, a los centros de Educación Secundaria del municipio de Murcia, de una guía socieducativa denominada ‘Consejos para tener una relación sana' para trabajar y reflexionar en el aula sobre los estereotipos de género que vamos asuminedo en nuestra socialización en cuanto al amor romántico y que pueden generar situaciones de violencia de género en el seno de las relaciones de pareja.

Teresa Franco ha señalado que "a la hora de implementar medidas y acciones que permitan prevenir la violencia de género en las relaciones de pareja, un elemento clave es conocer la contextualización histórica y social de los factores que permiten el germen de la violencia, en este caso la de género y sobre todo la que se da entre la población joven. La violencia de género proviene de un sistema de dominación que, mediante la construcción de normas culturales y sociales como los roles y estereotipos de género, alimentan y establecen relaciones desiguales entre hombres y mujeres".

"Esta situación de desigualdad estructural se entrecruza y sostiene a través de estructuras de violencia machista como la construcción de un modelo hegemónico y deseable de masculinidad, que favorece el uso de la violencia, y la construcción de modelos amorosos o de relaciones basados en la desigualdad y en mitos sobre el amor que

favorecen cierta tolerancia hacia comportamientos agresivos contra niñas, adolescentes y mujeres. Según estos estereotipos, ellas se socializan colocando el amor en el centro de sus vidas, asumiendo ser más dóciles y dulces", ha concluido.