Inmaculada Martínez, investigadora del área de Psicología Clínica de la Universidad de Murcia (UMU), ha revelado que el deterioro de la flexibilidad cognitiva podría ser un déficit específico en pacientes con Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), independientemente de variables como la sintomatología ansioso-depresiva o el nivel de inteligencia.

El estudio pone en relieve que los pacientes con TOC presentan un nivel menor de desempeño en distintas pruebas neuropsicológicas en comparación con el grupo de control no clínico.

Cuando entran en juego variables como los síntomas de ansiedad y depresión o el nivel de inteligencia, los bajos resultados en cuanto a flexibilidad cognitiva no cambian de forma significativa, lo que podría significar que la afectación en esta función ejecutiva es inherente al propio trastorno.

"La flexibilidad cognitiva es la única función que se ha visto deteriorada en los pacientes con TOC tras el control de las variables posiblemente relevantes, por lo que puede existir un déficit específico de esta función en este trastorno", explica Martínez.

La flexibilidad cognitiva es la capacidad que nos permite adaptar nuestra conducta y atención a las demandas cambiantes del entorno, modificando nuestra forma de actuar en función de la situación a la que nos enfrentemos. La disminución de la misma en pacientes con TOC podría relacionarse con las propias características que acompañan a este trastorno, como son los comportamientos de verificación compulsiva, la reproducción de conductas repetitivas e inflexibles o el padecimiento de temores y fobias.

Implicaciones de la investigación

Según la propia investigadora de la UMU, los resultados de su estudio "plantean la necesidad de incluir intervenciones neuropsicológicas donde se trabaje flexibilidad cognitiva dentro de los tratamientos clínicos del TOC".

Por suerte, es una capacidad que puede ser mejorada a través de distintas intervenciones, entre ellas tareas que precisen de un especialista en Neuropsicología, como la rehabilitación o la estimulación cognitiva, pero también otras más sencillas como intentar llegar a un punto fijo mediante itinerarios distintos o pensar usos diferentes que podríamos dar a objetos cotidianos.

Las pruebas

Para llevar a cabo el estudio se utilizaron diversas pruebas neuropsicológicas que nos ayudan a medir el nivel de rendimiento en las distintas funciones ejecutivas.

Entre estos instrumentos encontramos el Test de Clasificación de Tarjetas de Wisconsin en su versión computerizada, utilizado para medir la flexibilidad cognitiva, en el que el sujeto debe organizar una serie de cartas de acuerdo a un atributo determinado, ya sea la forma, el color o el número de elementos que aparezcan en ella.

TOC, una enfermedad más común de lo que pensamos

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el TOC se encuentra entre las cinco enfermedades psiquiátricas más frecuentes, afectando al 3% de la población aproximadamente. Solo en la Región de Murcia, esto se traduciría en más de 45.000 afectados.

La OMS sitúa además a este trastorno como una de las 20 enfermedades que suponen un nivel mayor de discapacidad para aquel que la padece. Sus causas son múltiples y su evolución puede darse de manera progresiva o a causa de una situación de estrés repentina.