El Grupo Municipal Socialista criticó recientemente las conclusiones del informe de Inspección de Trabajo, que advertían de varias deficiencias para el normal desarrollo laboral de los funcionarios del Ayuntamiento de Murcia. Algunas de esas carencias están perfectamente localizadas en el centro de Saavedra Fajardo. Allí está ubicada parte de la plantilla destinada a servicios de Descentralización, de Servicios Sociales y de Consumo que trabaja en instalaciones inaccesibles (para ellos y para los ciudadanos que necesitan su atención) y además con tejados de amianto, lo que para el concejal socialista Enrique Lorca es "un auténtico disparate" y también "una falta de respeto hacia los funcionarios".
"Desde luego, para el PP crear ambientes de trabajo seguros y confortables no es ninguna prioridad, igual que tampoco debe ser de su interés que los vecinos y vecinas sean atendidos en las mejores condiciones", afirma Lorca, quien explica también que los funcionarios están ubicados en las plantas 2 y 3 (Descentralización y Servicios Sociales, planta 2ª, y Consumo, 3ª) , pero el ascensor solo llega a la segunda planta, por lo que para acceder a la tercera hay que utilizar las escaleras, todos excepto las personas con movilidad reducida. "Esto incumple la Ley 4/2017, de 27 de junio, de accesibilidad universal de la Región de Murcia, artículo 16, pero es que, además, en la segunda planta no hay aseos, por lo que hay que subir por las escaleras a los de la tercera, que tampoco están habilitados para las personas con problemas de movilidad, lo que da igual porque al no tener ascensor no pueden acceder de ninguna de las maneras. Aquí se vuelve a vulnerar la Ley de Accesibilidad, pero en el artículo 21".
El concejal sigue apuntando anomalías que vulneran la Ley y que convierten los espacios de trabajo en zonas de riesgo para la salud: "hay despachos de Servicios Sociales que no tienen ninguna ventana, consisten en cuatro paredes sin luz natural, estos funcionarios y los administradores de las Juntas Municipales están apiñados y en un mismo despacho hay hasta cuatro puestos o más, por lo que no se puede crear ningún espacio de confidencialidad pese a tratar temas muy delicados".
Añade que, "para colmo, el tejado tiene amianto y en algunas zonas está en descomposición. Si esto ya de por sí es alarmante, lo que resulta absurdo es que en la mitad del tejado, correspondiente a las instalaciones de Urbamusa, se ha sustituido por otro material sin riesgos para la salud".
El concejal afirma que "todas estas deficiencias han sido denunciadas por los propios funcionarios, incluso algunas de ellas desde hace bastantes años, por lo que no logramos entender cómo se puede responder con esa flagrante pasividad".