Ramón Jáuregui, diputado del Parlamento Europeo ha ofrecido este viernes una ponencia titulada 'La responsabilidad social de las empresas ante los Derechos Humanos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)', que se enmarca dentro del proyecto ODSesiones, en el que la Universidad de Murcia va a dedicar un mes a cada ODS hasta abril de 2021.
En su ponencia, el eurodiputado ha subrayado que, en un mundo de cambios en el que crecen las desigualdades y hay un descontento social generalizado, las empresas no pueden ser ajenas a esas realidades, sobre todo teniendo en cuenta su gran capacidad de impacto. Una capacidad de impacto y un poder que puede ejemplificarse teniendo en cuenta que "el valor bursátil de las diez empresas más grandes del mundo es más grande que el PIB de los 180 países más pequeños del mundo", ha explicado.
Para Jáuregui, la implicación de las empresas en el progreso de la humanidad y las sociedades es un largo camino en el que lleva veinte años predicando, ya que "no se trata de que cumplan la ley o paguen sus impuestos, sino de algo más". Se trata de que "las empresas adquieran un compromiso con su entorno, con sus impactos y, así, contribuyan a crear una sociedad mejor y más sostenible".
En su opinión y haciendo balance de estos años, considera que no se ha conseguido el desarrollo esperado y que ha habido cierta confusión conceptual entre los conceptos de responsabilidad social y de acción social. Según su criterio, la mayoría de las empresas acaban haciendo acciones sociales como estrategia de marketing, pero considera que esto no es suficiente si no va unido a una política de responsabilidad social plena.
El eurodiputado ha expresado que, en el mundo globalizado en que vivimos y donde operan millones de empresas, se hace necesaria una ley universal que sirva para proteger la dignidad laboral y los derechos de los trabajadores, algo en lo que Naciones Unidas está trabajando desde hace cuatro años.
En esta línea, se pretende instalar una justicia extraterritorial, que permita que "la vulneración de los Derechos Humanos no sea exigible ante el país donde se produce, sino ante el país donde se encuentra la compañía que los ha vulnerado", ya que en muchos casos "en el país donde se produce la vulneración no hay seguridad jurídica".
Para concluir, Jáuregui ha expresado que "cuando la justicia coincide con lo necesario, la sociedad avanza"; una idea que ha de mover la conexión entre las empresas y la responsabilidad social.