Cambiemos Murcia ha pedido al Ayuntamiento que la calle Arzobispo Simón López, situada junto a la Plaza de las Flores, recupere lo antes posible su histórico nombre de Bodegones.
Tal y como describe una placa instalada a la entrada de la calle, el origen de la antigua denominación se debe a que en ella existían varios establecimientos de comidas muy populares, y era el pueblo quien nombraba las calles muchas veces en base a los gremios que se establecían en ellas, como Jabonerías, Trapería o Platería.
En 1914, por empeño del párroco de Santa Catalina, se le cambió el nombre tradicional por el de Arzobispo Simón López, generando cierta polémica por tratarse del último inquisidor de la historia.
Cullera Laica denunció en 2016 que, además, este prelado fue el responsable en 1826 de la última víctima de la Inquisición estando al frente de la diócesis de Valencia, Cayetano Ripoll, por "no quitarse el sombrero al paso de un copón".
Ante la falta de respuesta por parte del Ayuntamiento de Murcia, Cullera Laica presentó en noviembre de 2017 una queja al Defensor del Pueblo que ha sido admitida a trámite.
Desde Cambiemos Murcia se le ha pedido al Ayuntamiento explicaciones por esta inacción, y exige que dé respuesta al escrito de la asociación y abra el trámite para el cambio de nombre de la calle, ya que la petición "está más que justificada".