La concejala de Cambiemos Murcia, Margarita Guerrero, presentará en el Pleno de este jueves una iniciativa para que el Ayuntamiento de Murcia adopte medidas para reducir la exposición de la población a disruptores endocrinos, una serie de sustancias que podrían estar relacionadas con problemas metabólicos, neurológicos e inmunológicos, entre otros.
En este sentido, en el marco de la campaña "Mi ciudad cuida mis hormonas", promovida por la fundación Alborada (entidad que gestiona la cátedra de Patología y Medio Ambiente de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid), la formación municipalista propondrá por ejemplo que se retire progresivamente el uso de plaguicidas como el glifosato, que se fomente el uso de alimentos orgánicos en guarderías y comedores escolares y que se pongan en marcha campañas de difusión sobre las fuentes de exposición.
Sustancias como el Bisfenol A, utilizado en plásticos, envases y papel térmico; los conservantes y parabenos de la cosmética, perfumes y productos de limpieza, y los ftalatos y suavizantes de los plásticos y el calzado están en el punto de mira de la comunidad científica por su posibles efectos sobre el sistema endocrino.
En este sentido, la edil ha dicho que "por principio de precaución, las administraciones públicas tienen la obligación de poner todos los medios para evitar cualquier incidencia en la salud de los vecinos y vecinas".
Otra medidas a adoptar, según Cambiemos Murcia, sería que se incluyera en las cláusulas de los contratos públicos la limitación del uso de sustancias químicas susceptibles de actuar como disruptores endocrinos.
A la larga lista de enfermedades cuyo incremento posiblemente esté relacionado en cierta medida con estas sustancias, y que se estima que encarecen la factura sanitaria de la Unión Europea en 150.000 millones de euros, hay que añadir los problemas relacionados con la fertilidad y la salud reproductiva y el cáncer de mama y testicular.