AHORA MURCIA demanda la creación de la figura del Interlocutor Social en el municipio de Murcia, que debería estar nombrado al menos a nivel estatal desde el año 2015. La portavoz de Ahora Murcia, Alicia Morales, ha participado hoy en una rueda de prensa junto a Podemos para valorar las declaraciones del delegado del Gobierno sobre su gestión de la concentración neonazi del pasado sábado que coincidía con el desfile del Orgullo LGTBi y en la que se produjeron agresiones de los ultras fascistas.
Morales ha explicado que la figura cuyo nombramiento se solicita aparece en el Protocolo de Actuación para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para los Delitos de Odio y Conductas que Vulneran las Normas Legales sobre Discriminación, aprobado en 2014 y que establece que "para tratar cuestiones complejas como son los delitos de odio, es altamente recomendable que los cuerpos policiales establezcan relaciones con la comunidad y con organizaciones como ONG […] y otras organizaciones representativas de minorías".
La edil ha recordado que "la Asamblea regional aprobó por unanimidad una moción de Podemos que instaba al Gobierno de España al nombramiento del Interlocutor Social, conforme a la ley, pero como la figura todavía no existe Ahora Murcia va a llevar una moción sobre este asunto al próximo Pleno del Ayuntamiento de Murcia".
La portavoz de Ahora Murcia se ha manifestado "alarmada" con la gestión por parte del alcalde de Murcia y del delegado del Gobierno de la concentración neonazi del pasado sábado: "Ambos no encontraron ningún impedimento a conceder permiso a la concentración de un colectivo neofascista, ni siquiera sabiendo que la convocatoria era buscando coincidir con el desfile del Orgullo LGTBi, y ambos no han encontrado tampoco ningún fallo en su gestión de la concentración pese a las agresiones ocurridas".
Morales ha considerado "absolutamente inaceptable" que el delegado del Gobierno haya asegurado hoy que toda la gestión fue correcta, y ha afeado el hecho de que "Ballesta no se haya pronunciado acerca de las agresiones". En este sentido, la concejala ha manifestado que el alcalde "debe decidir qué tipo de municipio quiere, si quiere uno en el que los intolerantes impongan el miedo, intimiden e incluso cometan agresiones, alterando la convivencia pacífica de todos y todas". La edil mantiene que "la gravedad de los hechos sucedidos exigen que los responsables dejen de escurrir el bulto y asuman responsabilidades políticas".