Martínez-Oliva insta a aprobar un cuadro impositivo que trasladará a los contribuyentes unos tributos que atienden especialmente a los colectivos más vulnerables, entre ellos, personas desempleadas y mayores
El Concejal de Hacienda y Contratación, Eduardo Martínez-Oliva, ha convocado una nueva reunión con los grupos municipales el próximo lunes para continuar buscando el consenso y la concertación que permitan aprobar las ordenanzas fiscales que deben regir en 2017.
Las modificaciones introducidas en las ordenanzas fiscales presentadas por el Equipo de Gobierno sitúan la presión fiscal por debajo de la que existía en 2012, debido a las congelaciones, rebajas y exenciones de impuestos, tasas y precios.
El Alcalde ha comunicado que quedaba sobre la mesa la propuesta de modificación de ordenanzas fiscales, a la espera de un nuevo encuentro que haga posible un entendimiento buscado por el Equipo de Gobierno. Porque, como ha indicado el Alcalde, "el Partido Popular está comprometido con el diálogo, el consenso y la concertación, pero es necesario que fluya en ambas direcciones". "La voluntad de acuerdo debe ser bilateral y no unilateral, como está siendo hasta ahora", ha expresado el Alcalde.
"Mi ánimo de consenso ha sido, es y será total", ha declarado Martínez-Oliva en el Pleno, para reconocer a continuación que "jamás pensé que bajar los impuestos y la carga tributaria a los murcianos pudiera ser tan complicado, porque hemos traído al Pleno una propuesta que lo que hace, sobre todo, es bajar la presión fiscal".
El Concejal de Hacienda y Contratación, quien ha lamentado el cambio de parecer de PSOE y C´s, ha subrayado que la propuesta aprobada por Junta de Gobierno va a beneficiar a "todos los murcianos, pero más a quienes más lo necesitan, porque lo que mejor define estas ordenanzas fiscales es su carácter social y su atención al cuidado del medio ambiente".
Con carácter general, el proyecto del PP prevé la congelación de todos los impuestos, tasas y precios públicos, de tal forma que los contribuyentes pagarán el próximo año la misma cantidad que en 2016. De forma específica, se concreta en:
Ampliación de la cuota cero en la tasa de basuras a los beneficiarios del fondo social de la tarifa del agua, beneficiando así a más de 5.500 familias.
Supresión de copagos en los servicios de ayuda a domicilio, respiro familiar y teleasistencia.
Reducción del 20% de los precios públicos de las escuelas infantiles.
Bonificación del hasta el 50% de la cuota del IBI para propietarios de solares urbanos que mantengan sus cultivos tradicionales y estén incluidos en el Plan de Acción de Huerta. Los titulares de las parcelas que se comprometan a mantener al menos 3 años estos cultivos.
Se suprime la tasa por la tramitación de expedientes administrativos de cambio de titularidad en la licencia municipal de actividades.
Ahorro significativo para personas que se encuentren en situación de desempleo para bodas o inscripción en el registro de uniones civiles y en el uso de piscinas de verano.
Supresión de la tasa por prestación de servicios sanitarios.
Eliminación del pago de la tasa por la instalación en la vía pública de barras de bares en las fiestas de pedanías.
Introducción en el impuesto de Plusvalía la exención por dación en pago.