El concejal de Cambiemos Murcia Sergio Ramos ha reclamado hoy al Gobierno municipal que para la aplicación del Plan de Infraestructuras en Pedanías (PIPE) tenga en cuenta la necesidad de los territorios y, por tanto, no se haga un "reparto político en función del color de cada pedanía" como ha propuesto el equipo de Gobierno.
Para Ramos, los criterios utilizados hasta ahora por el PP para la ejecución del plan de inversiones se han caracterizado por el "oscurantismo" y "no han sido claros". "Han hecho lo que han querido", ha subrayado el edil, para quien la aplicación de las inversiones "debería estar al margen del partido de turno que gobierna".
La propuesta de la concejalía de Fomento para este 2016 en el marco del PIPE incluye en un reparto por las formaciones políticas que gobiernan en cada pedanía, de tal manera que las juntas gobernadas por el PP recibirán en total 422.820 euros, las del PSOE 519.313 y las de Ciudadanos 410.865. Se trata de un reparto "injusto" puesto que su aplicación obedece al criterio de los partidos, y no al consenso y las necesidades objetivas de las pedanías.
Esta situación desvirtúa el PIPE, según palabras de Ramos, al contemplar la aplicación de criterios "nada transparentes que no aseguran que se vayan a acometer actuaciones necesarias para la ciudadanía" y depender del juicio de una fuerza política. "Es dejar decisiones de un calado importante en manos de un partido político", explica Ramos.
Cambiemos Murcia ha propuesto que sea el Ayuntamiento quien realice un estudio con proyectos que son necesarios ejecutar en las pedanías, destacando aquellos que están cuantificados y son realizable en el plazo de un año, para el que se cuente con la participación de todas las formaciones y los representantes de las mismas representados en las juntas.
"Se trata de analizarlo bajo criterios globales y no provocar, como hace el PP, disputas entre pedanías".
El planteamiento de la formación municipalista evitaría esas disputas y estaría basado en criterios lógicos como las necesidades de los territorios. Así, ha puesto como ejemplo el caso de pequeñas pedanías que apenas tienen financiación pero que se encuentran en peor estado que otras con más habitantes. El reparto, añade Ramos, no sólo puede basarse en la densidad de la población o la extensión.
El edil también ha avanzado que su propuesta para 2017 es que se apliquen criterios objetivos de valoración de los proyectos como que no sean asumibles por una pedanía en solitario, que afecten a varias o sean estructurales para el municipio.
Respecto al reparto del presupuesto de Pedanías para 2017, por primera vez el reparto se hará en base a criterios establecidos como es resultado de una moción aprobada por los grupos de la oposición que contó con el único rechazo del PP, así como de la reivindicación histórica de colectivos y vecinos. "Se trata de un punto de inicio positivo, aunque todavía queda mucho camino por delante", ha opinado Ramos, quien ha mencionado como ejemplo la necesidad de que en el próximo ejercicio se tengan en cuenta criterios de carácter social como el Índice de Desarrollo Humano, de cara a dar también apoyo a las Zonas más desfavorecidas.