Los barrios y pedanías reciben este año más de 373 millones de euros del Presupuesto municipal, tanto para inversiones como para financiar gasto corriente. Además, nunca han manejado directamente más partidas que en 2016.
En concreto, gestionan un presupuesto que ha crecido el 32% respecto a los fondos que manejaban hasta ahora, sin contar con las partidas incluidas en el plan PIPE (que asciende a 1,3 M€).
Estas cifras denotan la importancia que el Equipo de Gobierno municipal le da a la participación ciudadana y a la descentralización y al papel esencial que se asigna a los barrios y pedanías.
Martínez-Oliva, concejal de Hacienda y Contratación, recuerda que la mayor parte del gasto real del Ayuntamiento se realiza en las pedanías. Como ejemplo, los contratos de limpieza viaria, recogida de basura, alumbrado, mantenimiento de jardines, seguridad, etc. que mayoritariamente se realiza más fuera del casco urbano de la ciudad pero "no es imaginable ni realista pensar en trocear esos contratos para que, de esa manera, se contabilicen como gestión directa por parte de las juntas". Dividir un acuerdo en 60 "minicontratos" sólo repercutiría en un "peor servicio, más caro y más deficiente", asegura.
No obstante, el contrario, Martínez-Oliva subraya que "nuestra responsabilidad es que los murcianos cuenten con los mejores servicios públicos posibles al menor coste". Para ello, el Equipo de Gobierno, junto a los grupos de la oposición, están trabajando para adaptar el Reglamento de Participación Ciudadana a las necesidades de los barrios y pedanías.