Angeles Micol señala que "procede la paralización inmediata para evitar el malgasto de dinero público, juicios innecesarios y posibles condenas vergonzantes a políticos y funcionarios"
AHORA MURCIA va a presentar la solicitud de revisión de oficio del plan de ampliación de la zona Norte de la UCAM, el Plan Especial GU-ÑR3, al considerar que si en un futuro se resuelve que es nulo de pleno derecho por no cumplir las determinaciones de la resolución de la declaración del entorno BIC del Monasterio de Los Jerónimos, seremos todos los murcianos los que tendremos que pagar el lucro cesante de la UCAM y los perjuicios ocasionados. La concejala Angeles Micol señala "si esto ocurre, entonces sucederá lo mismo que con el aparcamiento de San Esteban, que por no parar a tiempo ha supuesto el pago con dinero de todos los murcianos de seis millones de euros a la empresa constructora en concepto de indemnización". Además, la formación municipal llevará una moción al próximo Pleno para que el Ayuntamiento presente una solicitud de revisión de oficio similar o se adhiera a la de Ahora Murcia.
La edil explica que "procede la paralización inmediata de la adopción de medidas cautelares hasta que el Plan Especial de la UCAM esté adaptado a lo establecido en la Ley. De esta forma, evitaremos el malgasto de dinero público, juicios innecesarios y posibles condenas vergonzantes a políticos y funcionarios por posible corrupción".
Micol recuerda que "el Plan Especial por el que la UCAM tiene previsto la construcción de múltiples instalaciones con edificios de mas de cinco plantas de altura frente al Monasterio de los Jerónimos fue aprobado en 2009 por el Ayuntamiento de Murcia sin el preceptivo y vinculante informe de la Dirección General de Bienes Culturales de la CARM. Esta falta de informe ya supone la nulidad del Plan Especial aprobado, pues el citado Plan Especial se encuentra dentro del ámbito incoado para ser declarado Bien de Interés Cultural (BIC) del Monasterio de los Jerónimos, y hay que recordar que mientras está incoado tiene la misma protección que si ya estuviese declarado".
"Finalmente", señala la edil, "mediante resolución de la CARM de 23 de marzo de 2012 se produjo la declaración del entorno BIC del Monasterio, pero el Ayuntamiento de Murcia recurrió dicha resolución con la pretensión de reducir el área protegida. Dicho recurso finalizó en 2014 con una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Murcia que desestimó las pretensiones del Consistorio de reducir el entorno de protección del Monasterio, y declaró que el entorno incoado es correcto y que el planeamiento municipal debe adaptarse a la condiciones de dicho entorno".
Micol subraya que "la Ley 4/2007 de Patrimonio Cultual de la Región de Murcia establece en su normativa que el Ayuntamiento tenía dos años para adaptar su planeamiento al entorno delimitado, y sucede que ese plazo ya se ha sobrepasado con creces desde la resolución de la CARM de 23 de marzo de 2012. Por lo tanto", indica, "lo que procedía era que el Plan Especial GU-ÑR3 hubiese sido revisado de oficio por el Ayuntamiento para llevar a cabo su adaptación a las determinaciones establecidas en la declaración BIC del entorno del Monasterio de Los Jerónimos".
Como indica la concejala, "a todo lo anterior se añade que dentro del ámbito del Plan Especial GU-ÑR3 existía una edificación del siglo XVIII conocida como El Corralazo, con un escudo heráldico en su fachada. Dicha edificación, protegida por la Ley de Patrimonio Cultural y el PGOU de Murcia, fue derribada por la Fundación universitaria".
Todo lo anterior fue puesto de manifiesto y denunciado, destaca Micol, en la Dirección General de Cultura de la CARM, "que inició un procedimiento administrativo en el que se establecieron una medidas cautelares, precisamente para advertir de la necesidad de adaptación del Plan Especial GU-ÑR3 al entorno BIC, destacando que las edificaciones previstas no cumplirían las condiciones mínimas para tener encaje frente al monumento del Monasterio".
"Pese a todo lo anterior", lamenta la edil, "resulta que se ha emitido una resolución por la directora general de Cultura en la que se ha ignorado toda la fase de instrucción llevada a cabo de forma ejemplar por los funcionarios de dicha Dirección General, y se ha amparado en un informe de los Servicios Jurídicos de la CARM, donde se determina la posibilidad de levantar las medidas cautelares, haciendo referencia a la necesidad de adaptación del Plan Especial GU-ÑR3, pero pasando de soslayo sobre dicha cuestión".
Para Micol, "sorprendentemente la resolución de la directora general tampoco recoge la cuestión de la necesidad de la adaptación del Plan Especial GU-ÑR3, pues sus determinaciones no son posibles en el entorno protegido, y se centra únicamente en resolver la cuestión del derribo de El Corralazo, dejando así vía libre para que la Fundación UCAM pueda solicitar licencias de obras al Ayuntamiento de Murcia e iniciar las construcciones que posiblemente vulnerarían la Ley de Patrimonio al no respetar el entorno delimitado".