Recuerda que ofrecerá el camino más rápido para llegar al corazón de Europa
El Alcalde, Miguel Ángel Cámara, ha expresado su satisfacción por poder presentar a toda la sociedad el Corredor Mediterráneo como una realidad, dado que este semestre se habrá licitado el tramo entre la frontera francesa y Valencia, y antes de que finalice el año se hará lo propio con el que unirá esta capital con Alicante, Cartagena y Murcia.
Así se ha expresado minutos antes de iniciar la cumbre a la que han asistido representantes de las administraciones públicas, universidades, colegios profesionales y empresarios de la Comunidad Valenciana y Murcia. La reunión, celebrada esta mañana, ha estado presidida por el Consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Antonio Sevilla, la Consejera valenciana de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, y el Alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara.
La construcción del Corredor Mediterráneo, cuya terminación está prevista para 2016 y su inversión alcanzará los 1.400 millones de euros, enlazará el Levante español con el centro de Europa, en un ámbito que reúne el 54% del PIB, de la población, de la capacidad exportadora, del turismo y de la producción agraria.
Miguel Ángel Cámara, que califica este proyecto como un elemento esencial de desarrollo económico y social de una parte muy importante de España, ha expresado su confianza en que su desarrollo “potencie las zonas de actividad logística y las nuevas oportunidades para negocio y actividad económica y, sobre todo, de generación de empleo”.
La actuación se convertirá en una de las grandes infraestructuras productivas que “ayudarán a salir reforzados de la crisis”, ha señalado Cámara, quien ha recordado que se trata del itinerario por el que discurre el mayor tráfico de mercancías de la península Ibérica y el que tiene mayor potencial de crecimiento e incidencia en la competitividad del conjunto de España.
Dada la capacidad de atracción de la ciudad de Murcia, cualquier vía de comunicación en buenas condiciones, con seguridad y en los tiempos razonables se convierte también en expectativas y motores de desarrollo y generación de riqueza y, al mismo tiempo, de promoción de la ciudad”