"Cada año nuestro Ayuntamiento tiene que reponer más de 500 señales de tráfico, dañadas por actos vandálicos, lo que además de  representar un peligro para la seguridad vial, supone un gasto innecesario, que sale del bolsillo de los ciudadanos. Ayúdanos a cuidar lo que es de todos".

Con esta frase arranca la nueva campaña "Esto no es buena señal" que ha creado la concejalía de Tráfico y Transportes, que dirige Javier Iniesta, para concienciar a los murcianos sobre el cuidado a las señales de tráfico instaladas en el municipio.

No se trata solo de obedecerlas para proteger nuestra propia seguridad y evitar accidentes, sino respetar las propias señales ubicadas en nuestras calles y plazas, ya que su instalación y conservación suponen un gasto de 617.000 euros al año. De este importe, el 25% de las intervenciones se deben a vandalismo: se trata de destrozos ocasionados por golpes, patadas, pedradas o maniobras de aparcamiento.

El deterioro de estas señales cuesta a las arcas municipales aproximadamente unos 160.000 euros al año en reposiciones de 500 postes, indicadores, letreros, espejos, rótulos y otros.

Como ejemplo, hay que señalar que cambiar una señal de chapa de medidas 60 por 90 con su poste supone un gasto de 137,20 euros; la misma señal en aluminio cuesta 137.20 euros; un espejo acrílico de 60 cm con su poste vale 141 euros y un hito de PVC tiene un coste de 52 euros.

Como refuerzo a esta campaña, la concejalía ha habilitado un correo electrónico al que se pueden dirigir los ciudadanos para hacer llegar sus sugerencias e informar al Ayuntamiento de desperfectos en señales. La dirección es ayudanosacuidarloqueesdetodos@ayto-murcia.es