El portavoz del PSOE, Pedro López, muestra, en primer lugar, su satisfacción porque la nueva empresa concesionaria del transporte público urbano mantenga los puestos de trabajo de los trabajadores actuales.
Por otra parte, López lamenta que la reforma del transporte público no beneficie a todos los murcianos por igual: al 60 por ciento de la población que vive en pedanías se les niega el derecho a acceder a un bono compartido para bus y tranvía y además se les penaliza con billetes más caros.
"Una clara discriminación hacia los ciudadanos de pedanías que una vez más van a ver restringidos sus derechos por no vivir en la ciudad", reitera el portavoz socialista, quien insiste en la necesidad de lograr un gran pacto global para la movilidad en el municipio, sobre todo ahora que el PP ha aprobado en solitario el pliego de condiciones que va a regular el transporte público en Murcia hasta el 2027.