El Alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, ha asistido esta mañana a la Cumbre de Alcaldes del Mediterráneo para exigir al Gobierno central que apoye con firmeza el trazado de Corredor Mediterráneo propuesto por Ferrmed y que se convertirá en una de las grandes infraestructuras productivas que ayudarán a salir reforzados de la crisis que atraviesa el país.
Cámara ha subrayado durante el encuentro que esta opción supone una de las mejores oportunidades para España y Europa de superar la crisis económica e impulsar el empleo, la productividad y la sostenibilidad. Además, ha añadido que dicho Corredor permitirá utilizar las infraestructuras portuarias del Mediterráneo como los puertos de Málaga, Cartagena, Alicante, Valencia o Barcelona, entre otros.
A la Cumbre de Alcaldes han asistido los primeros ediles de Gerona, Tarragona, Barcelona, Castellón, Valencia, Alicante, Murcia, Almería, Granada, Málaga y Palma de Mallorca. Todos han suscrito un decálogo para la defensa de este corredor ferroviario, donde destacan que se trata del camino más rápido para llegar al corazón de Europa (un ahorro de hasta 500 kilómetros respecto a cualquier otra opción); el más compacto de los que hay en España y por el que discurre el mayor tráfico de mercancías de la península Ibérica; y el que tiene mayor potencial de crecimiento e incidencia en la competitividad del conjunto de España.
El Alcalde ha destacado que las doce capitales de provincia del Arco Mediterráneo nos hemos comprometido a aunar esfuerzos con los agentes económicos, sociales y empresariales y las administraciones públicas europeas, nacionales y autonómicas en una estrategia común de progreso y prosperidad para toda Europa. El Corredor Mediterráneo es una cuestión de los Estados y debe ser realidad en el menor plazo posible para garantizar la competitividad y la cohesión de las regiones europeas.
Cámara, quien regresa de la Cumbre para asistir a la misa funeral por el Alcalde de Yecla, Juan Miguel Benedito Rodríguez, también ha explicado que la construcción del corredor supondría una reducción de casi 800.000 toneladas de emisiones anuales de CO2, una actuación prioritaria en la lucha contra el cambio climático. Además, como parte integrante del Gran Eje Ferrmed, al unir los dos frentes portuarios más importantes de Europa (Mar del Norte y Mediterráneo Occidental), tiene un gran valor estratégico para la Unión Europea.