210 jóvenes murcianos, de entre 13 y 25 años, han vivido este verano una experiencia única participando en alguno de los treinta intercambios juveniles al extranjero que organiza la Concejalía de Juventud, que dirige Miguel Cascales.
Este año se han escogido doce destinos, que son Polonia, Bélgica, Francia, Eslovaquia, Alemania, Finlandia, Rumanía, Estonia, Luxemburgo, Eslovenia, Italia y Portugal. Cada intercambio cuenta con temáticas diferentes como folklore, Europa, Summer Rock, el circo, aventura en la naturaleza, explorando los bosques de Finlandia, 27ª Semana Internacional de la Música, deporte, manga, consumo y ahorro, arte, arqueología, etc. En esta edición destaca la iniciativa ‘Unidos por el Deporte’, llevada a cabo en colaboración con la ONCE, en la que han participado jóvenes ciegos de Murcia, Bulgaria, Alemania, Italia, Bélgica, Hungría y Francia, y que se desarrolló en Rumanía del 15 al 25 de julio.
Los intercambios comenzaron en junio y finalizan este mes, con una duración que oscila entre cinco y veinte días.
El objetivo que se persigue con estos intercambios para jóvenes es favorecer el conocimiento de otros idiomas, adquirir nuevas competencias interculturales y propiciar el conocimiento de los países de la Unión Europea. Así mismo, los jóvenes de otros países mejoran sus conocimientos de España y Murcia, y practican español.
Se trata de estancias temáticas en diferentes países, compartiendo actividades y conviviendo con jóvenes de otras ciudades. Este programa no consiste en intercambio de jóvenes con familias si no en encuentros de jóvenes participando en proyectos promovidos por el Ayuntamiento de Murcia y otros Ayuntamientos o entidades.
Más de 6.000 jóvenes han participado
El Plan Municipal de Intercambios se puso en marcha en 1996 y desde esa fecha han participado más de 6.000 jóvenes. Con estas actividades, la mayoría financiadas por la Unión Europea, se promueve la movilidad en la formación de los jóvenes, ya que, como constatan los estudios, los jóvenes europeos con este tipo de experiencias en su juventud son más proclives a la movilidad en su vida laboral futura, aumentando así las posibilidades de empleo.