El concejal socialista Sebastián Peñaranda denuncia la invasión descontrolada de vertederos repletos de basura, escombros, enseres y todo tipo de desechos; en el caso de Guadalupe, por citar un ejemplo, en tan solo dos kilómetros cuadrados se pueden encontrar más de diez focos de suciedad
El edil del PSOE Sebastián Peñaranda califica de inadmisible la indiferencia absoluta del PP ante la proliferación incontrolada de vertederos ilegales a lo largo y ancho del municipio de Murcia.
Constituye una grave irresponsabilidad desde el punto de vista sanitario y medioambiental –lamenta Peñaranda- quien recuerda al gobierno local que está ignorando una realidad que afecta de forma muy negativa a la salud de los ciudadanos y al medio ambiente porque se contamina el suelo, las aguas subterráneas y hasta la atmósfera por la emisión de gases; proliferan insectos y roedores y aumenta de forma considerable el riesgo de incendios.
Es el caso concreto de la pedanía de Guadalupe, donde en tan solo dos kilómetros cuadrados (se adjuntan imágenes) se pueden encontrar más de diez focos incontrolados de suciedad donde se acumulan escombros, basuras, maleza, enseres, etc.
"Lo que muestra este ejemplo, denuncia el concejal socialista, es tan solo la punta del iceberg de un problema grave que parece no afectar al PP municipal que no para de mirar hacia otro lado y hacer dejación de sus funciones de control, inspección y sanción".
El gobierno local –reitera el edil del PSOE- está permitiendo que en solares, incluso de titularidad municipal, se viertan basuras, escombros y deshechos de todo tipo, sin multar a los propietarios, ni obligar a vallar las parcelas y mantenerlas limpias mediante una correcta inspección.
Por todo ello, Peñaranda planteará al PP en el pleno de este mes la adopción de una serie de medidas que pongan freno a esta situación, entre las que destacan la puesta en marcha de un plan municipal de control de vertederos incontrolados, un aumento de las sanciones, en la actualidad más irrisorias que disuasorias; sellado y restauración ambiental de los vertederos incontrolados y una mayor agilización por parte del Ayuntamiento ante las denuncias, incluyendo el posterior seguimiento; entre otras.