Desde 2007, el Ayuntamiento de Murcia antepone la conciencia ambiental en la adjudicación de contratos de productos forestales. Este proceder, adoptado por decisión del Alcalde, Miguel Ángel Cámara, supone priorizar la adquisición de aquellos artículos que hayan sido certificados por un sistema que garantice una gestión sostenible de los bosques.
Esta política de gestión le ha valido al Ayuntamiento el reconocimiento de "Ciudad por los Bosques" que le ha otorgado WWF España. Miguel Ángel Cámara ha recibido esta mañana esta distinción, que le ha sido entregada por Enrique Segovia, Director de Conservación de WWF España. El acto ha contado con la presencia de la responsable de Medio Ambiente y Calidad Urbana, Adela Martínez-Cachá, y han sido invitados los responsables de los servicios municipios, empresas locales del sector y proveedores del Ayuntamiento.
Murcia se ha convertido así en una de las 9 entidades españolas que integran el Observatorio "Ciudades por los Bosques", junto con Barcelona, Benicarló, Gavá, León, L'Hospitalet de Llobregat, Madrid, Sant Boi de Llobregat y la Diputación de Toledo. Son las 9 ciudades españolas que forman la lista verde por aplicar un programa de compra responsable para controlar el origen de los productos forestales que consumen.
A la vanguardia
Los bosques son el origen de la madera que se utiliza en artículos como mobiliario urbano, zonas verdes, material de construcción de edificios, papel para oficinas, etc. Al mismo tiempo, proporcionan beneficios incalculables al ser humano, puesto que filtran el agua, actúan como amortiguadores del calentamiento global, proporcionan multitud de productos (madera, corcho, plantas medicinales, etc.), sirven como lugares de esparcimiento, albergan especies vegetales y animales y son sistemas esenciales para la economía local y a escala global.
El decreto aprobado en 2007 garantiza que el Ayuntamiento de Murcia no consume madera ni productos derivados procedentes de talas ilegales de terceros países y, al contrario, favorece la adquisición de aquellos procedentes de bosques certificados.
Así, el criterio de calidad ambiental introducido en las licitaciones públicas valora el uso de maderas certificadas con los requisitos más exigentes posibles que garantice su origen, excluyéndose las propuestas relacionadas con explotaciones ilegales. Además, en el caso del papel se tiene en cuenta que sea reciclado.
En la compra de madera para mobiliario urbano o de parques y jardines, pavimentos, edificios, material y mobiliario de oficina, se concede una mayor valoración a las adquisiciones que ofrezcan las mayores garantías de su origen social y ambientalmente responsable.
Planteamiento local, victoria global
Miguel Ángel Cámara ha señalado que el reconocimiento de Murcia como "Ciudad por los Bosques" afianza aún más el compromiso de lucha con los efectos del cambio climático y "nos indica que caminamos por el camino correcto".
En este sentido, el Alcalde ha recordado que los municipios tienen que cumplir un papel de liderazgo porque sólo en Europa, el 75% de los habitantes vive en las ciudades, que es donde se consume el 80% de la energía. De ahí la importancia de que las ciudades se involucren en la lucha contra el cambio climático, lo que convierte a "los ayuntamientos en la clave de la sostenibilidad”.
En el caso de Murcia, el Plan de Acción de Energía Sostenible se ha fijado el reto de reducir en 2020 el 40% las emisiones de 2007 y, para llegar a este objetivo, se plantea disminuir un 20% a través de medidas de ahorro, eficiencia energética y energías renovables y otro 20% a través de la creación de sumideros de CO2 (zonas verdes).
El Ayuntamiento de Murcia destina cada año unos 290.000 euros para adquirir 19.742 productos de papelería, sobre todo paquetes de papel –cada uno con 500 folios, lo que da un total de 9.871.000 folios-.
Además, en los últimos 2 años se han plantado 45.190 árboles en la vía pública, jardines, colegios, etc, y en estos momentos Murcia dispone de una superficie de 1.603 hectáreas de fincas forestales municipales, cuando hace unos años apenas alcanzaba las 1.000 hectáreas.
Las medidas puestas en marcha en torno al Plan de Acción de Energía Sostenible de Murcia han permitido ahorrar 195 GWh/año (gigawatios hora al año), lo que supone 117.000 toneladas de CO2/año.