La actividad musical que se desarrolló en la catedral murciana en el periodo de tiempo comprendido entre el año 1600 y el 1750 es el tema de estudio de la tesis doctoral leída en la Universidad de Murcia por María Consolación Prats Redondo.
La autora ha analizado los primeros ciento cincuenta años de creación musical en la catedral de Murcia que pueden constatarse documentalmente y ha concluido que ésta, por su categoría de centro medio pero con rentas elevadas, constituía un foco de gran importancia en esa época.
Así, se configuró como paso casi obligado de aquellos músicos –tanto aragoneses y levantinos, como andaluces y castellanos- que, viniendo de iglesias de menor o igual rango –y sólo en contadas ocasiones, mayor-, aspiraban a otras catedrales de mayor importancia.
En esta catedral, dice la autora, confluyeron músicos de la escuela aragonesa que, estando unos años en Murcia, adquirían una práctica musical de la escuela castellana y se preparaban así para acceder a otras capillas, principalmente de la corte madrileña.
Para su tesis, María Consolación Prats ha buscado en el archivo capitular, en el que sus contenidos sonoros casi no han sido estudiados, y el archivo musical, cuyas obras apenas han vuelto a salir a la luz desde su creación.
La tesis fue dirigida por Antonio Ezquerro Esteban.