Herguedas ha explicado que el Plan General de Ordenación Urbana de Murcia permite que los propietarios de terrenos forestales puedan adscribirlos a un desarrollo urbanístico, en su mayoría situados en el campo y en las laderas de la sierra Carrascoy, y aumentar así su edificabilidad.
Ha señalado al respecto que "la forma en que se han realizado algunas de esas adscripciones está siendo objeto de investigación con motivo del juicio por el caso Barraca, que investiga las supuestas acciones irregulares de un grupo de personas encabezadas por el ex jefe de Planeamiento del ayuntamiento, Joaquín Peñalver". Por ello, el consistorio "debe manejar información sobre las fincas forestales adscritas con el fin de tener control de sus actividades urbanísticas y hacer un seguimiento de la gestión ambiental, al tiempo que debe presentarla a los ciudadanos ya que estos terrenos se han incorporado a los espacios naturales del municipio.